El Castilla sigue sin encontrar la 'cura' a sus males
Mensajero 2-2 R.M. Castilla
Federico Valverde en un partido con el Castilla
El conjunto de Solari acumula cinco partidos consecutivos sin conocer la victoria. Su último triunfo data del pasado 6 de noviembre ante el Sestao River, por lo que en este mes y pocos días solo ha logrado sumar tres puntos en otros tantos empates. Se trata de una dinámica negativa que el equipo no logró finalizar este domingo ante el Mensajero, y eso que acabó mereciéndolo por juego y por ocasiones. Pero el filial se vio atrás en el marcador por hasta dos ocasiones y al final se tuvo que conformar con un empate que sabe a poco.
El duelo comenzó con un Odegaard imperial y con Achraaf creando mucho peligro por su banda. Sin embargo, las ocasiones más peligrosas las producía el equipo canario, ya que Carlos Abad tuvo que emplearse a fondo para evitar el primer gol del partido en un mano a mano con Alex Cruz. Fue todo un acierto del portero que se vio empañado unos minutos después, ya que una salida suya en falso tras un córner permitió que Nacho cabeceara el balón a la red a placer poco antes del descanso.
Otro error defensivo empañó la buena segunda parte
En la segunda parte el Castilla mejoró y encontró en Campuzano a su principal referencia ofensiva. El delantero ya avisó con una clara ocasión para igualar tras la reanudación, aunque solo tardaría 7 minutos en lograr la igualada gracias a un potente chut desde fuera del área que golpeaba en el larguero y botaba en el interior de la portería del mensajero.
El empate a uno animó al filial, por lo que el equipo de Solari se volcó para buscar el segundo. Esto hizo que el Castilla descuidara su defensa y el Mensajero empezó a crear peligro a la contra. Abad se vio obligado a realizar dos buenas atajadas para evitar el segundo de los canarios, pero no pudo hacer nada cuando Yeray cabeceó entre palos un centro desde la izquierda que cogió a la zaga merengue bastante despistada.
El 2-1 provocó que el Castilla buscara con más ahínco si cabe el tanto, y al final su dominio territorial acabó teniendo justo premio con un gol de Nikos en el minuto 85. El griego desvió a la red un centro que llegó a sus pies tras varios rebotes, estableciendo así una igualada con casi diez minutos por jugar. Pero aunque el equipo blanco lo buscó con ganas e hizo méritos para lograr el tercero, el resultado no se movió del 2-2. Así, los merengues logran un punto que les sabe a poco y que les deja en la novena plaza del Grupo II de Segunda B con 25 puntos. Una 'tierra de nadie' que al menos les sigue manteniendo a 'tiro de piedra' - tres puntos con partidos aún por jugarse en esta jornada - de los puestos de play-offs.
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