Este Castilla está muy vivo

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Los gallegos se plantaban en el partido como terceros de la clasificación. Además, podían presumir de estar invictos en el Municipal de Barreiro y de haber ganado sus cinco primeros partidos en casa. Por ello el reto era de máxima dificultad para el filial madridista, el cual a su vez acumulaba cinco choques sin conocer la victoria y había empezado a hundirse en el 'pozo' de la tabla. Aunque por si esto fuera poco, el partido todavía empezó con un guión digno de película de 'Halloween', ya que los celestes solo tardaron seis minutos en adelantarse en el marcador con un golazo de Brais tras una buena acción personal.

Mal inicio que supo enderezar el Castilla

De hecho los primeros 20 minutos del partido fueron de auténtica pesadilla para el filial. Los jugadores demostraron haber entrado en el campo sin concentración y con miedo, por lo que los gallegos rozaron el segundo gol del partido en más de una ocasión. Pero todo cambió en el minuto 25, cuando un error tremendo del guardameta celtiña Sotres permitió que un suave balón que Jaume puso en el área acabara entrando mansamente en la portería.

Fue un tanto clave porque el Celta acusó el golpe y solo cuatro minutos después terminaba de hundirse con la llegada del 1-2. El Castilla aprovechó un contragolpe por la banda izquierda, Quezada ganó la línea de fondo con un buen regate y le puso el balón en el corazón del área a Seoane para que empujara el balón a la red. Se consumaba así la remontada y con ella llegaba la calma en un equipo que solo diez minutos antes estaba tocando fondo.

Exhibición merengue en la segunda parte

Desde el tanto de Seoane hasta el descanso el filial merengue se dedicó a bajar las revoluciones del partido. El resultado era un tesoro y había que conservarlo, por lo que todo quedó pendiente de los últimos 45 minutos. Y en ellos el Castilla acabó pasando por encima a su rival a pesar de que en el minuto 52 Reguilón tuvo que sacar el balón bajo palos para evitar el empate. Fue esta la única ocasión en la que el Celta se acercó de verdad a la igualada, porque en el minuto 65 Quezada sentenciaba con un potente disparo desde fuera del área. 

Con el 1-3 el choque se convirtió en un correcalles para los dos equipos en el que el equipo blanco volvió a salir favorecido. A falta de 13 minutos Dani Gómez ponía el 1-4 definitivo nada más saltar al césped sustituyendo a Cristo. El 'Tiburón' culminaba de forma magnífica un contragolpe visitante y sellaba el triunfo más importante de lo que llevamos de temporada. Tanto por la situación en la que llegaba el equipo al partido como por el juego desplegado, ya que los blancos supieron recomponerse de sus pésimos 20 minutos iniciales y acabaron dando mucho espectáculo.

De esta forma con esta victoria el Castilla suma 13 puntos y coge mucho aire tras vivir de lleno en la zona roja de la tabla. Esta tarde se terminará de disputar toda la jornada, pero todo hace pensar que al menos el equipo podrá respirar tranquilo hasta el fin de semana al verse fuera de los puestos de descenso. Sin duda, la mejor noticia posible para preparar el próximo choque ante otro rival peligroso, el Rápido de Bouzas.