El Real Madrid Castilla se ha encontrado con una dolorosa derrota ante el Nalvalcarnero, y justo cuando mejor estaba jugando y después de haber dado la vuelta al tanto inicial del conjunto visitante, que se encontró con un golpe de suerte para llevarse tres puntos del estadio Alfredo Di Stéfano.
Los chicos de Solari fueron capaces de recuperar su mejor versión y reponerse al tanto del Navalcarnero en el minuto 17 en el primer acercamiento a la portería de Belman y después de que el balón golpease primero en el travesaño, pero el premio se acabó esfumando.
A pesar del 0-1 en el marcador el Castilla supo tener paciencia para empezar a dominar hasta la saciedad al Navalcarnero, algo que ocurrió durante algo más de una hora, sobre todo después de que Cristo firmase un doblete que hacía pensar hasta en una goleada merengue.
El Castilla estaba dominando sin reparos, encerrando al Navalcarnero en su campo, pero en el 77 Manu Hernando vio su segunda amarilla después de intentar alcanzar un pase complicado y escurrirse, llevándose por delante al delantero visitante, por lo que se fue al vestuario antes de tiempo.
Pero es que en esa falta Belman intentó blocar el balón en dos tiempos con la mala fortuna de que el balón se quedó entre los brazos de un delantero del Navalcarnero que estaba en el suelo y desde ahí dio un pase atrás para que Jesús pusiese el 2-2 en una jugada de locos.
El problema es que tres minutos después Stevens soltó un zapatazo que entró por la escuadra y así el Navalcarnero daba de nuevo la vuelta al marcador ante un Castilla que, a pesar de estar con diez jugadores, lo intentó, pero sin apenas suerte para conseguir siquiera un empate.
FLORENTINO BLINDA A 'LA FÁBRICA' PARA EVITAR LAS GARRAS DE LOS JEQUES
'Cuando las barbas vecinas veas cortar pon las tuyas a remojar' dice el refranero. Y el Real Madrid lo ha tenido muy en cuenta, porque en el Santiago Bernabéu no se han quedado quietos tras contemplar cómo en los dos últimos años el Barcelona sufría una tremenda fuga de talento de La Masía por la llegada de los petrodólares al fútbol. Así, el conjunto madrileño ha decidido poner medidas para evitar que alguna de sus potenciales perlas se marche por la puerta de atrás por una simple cuestión de dinero.
La noticia la publica este sábado el diario 'Marca' en su edición. Según el periodista José Félix Díaz en el conjunto blanco temen que la irrupción del dinero árabe en el fútbol pueda afectar de lleno a su trabajo en Valdebebas. En Barcelona jugadores como Mboula (Mónaco), Eric García (Manchester City) o Sergio Gómez (Borussia Dortmund) se han marchado porque han recibido poderosas ofertas de clubes extranjeros contra las que el equipo catalán no ha podido pelear, por lo que en la capital de España han tomado buena nota de esta situación.
¿Y cuál es la mejor forma de luchar contra ella? Aprovechar que la normativa española permite la imposición de cláusulas para establecer cifras prohibitivas para la salida de los canteranos merengues. Así el Real Madrid ya se ha puesto como norma 'blindar' con una cláusula mínima de 30 millones de euros a todo futbolista de su cantera que prometa y que tenga más de 16 años. De esta forma el club se asegura no ver cómo uno de estos 'clubes' le arrebata a una de sus perlas, o en todo caso, percibir un dineral si finalmente se acaba dando esta situación.
Cabe recordar que en la última década 'cracks' en potencia como Juan Mata o Pozo se marcharon del Real Madrid por muy poco dinero y por la puerta de atrás. Y eso es lo que precisamente quiere evitar ahora el conjunto merengue. Pretende tener siempre la potestad para decidir el futuro de sus futbolistas más jóvenes, de forma que sea el propio club el que decide si acepta o no una oferta. Y es que en Concha Espina nunca pondrán reparos si una de sus promesas recibe una gran propuesta y la misma es interesante para todas las partes.
Así que flexibilidad ante todo. Tanto para negociar como para escuchar propuestas. El Real Madrid no es una 'cárcel' y si un futbolista de la cantera llega con una oferta justa de otro club podrá salir sin problemas. Al fin y al cabo el 'salario tope' de Valdebebas según el citado medio es de 250.000 euros, por lo que si un club extranjero pone más dinero sobre la mesa el jugador en cuestión podrá solicitar su adiós y el mismo se negociará. Aquí la clave es que el club tenga siempre la facultad de decidir, y eso es algo que se lo dará el hecho de imponer altas cláusulas para evitar que haya 'salidas' por sorpresa y a traición.
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