A falta de 3 jornadas y con la primera posición ya conseguida, el filial del Real Madrid se tomó el partido con la máxima seriedad posible para agradar al público que asistió al Estadio Alfredo Di Stéfano. El partido quedó casi sentenciado en los primeros 15 minutos gracias a dos auténticos golazos de Lucas y Joselu.
Mención especial para el gol del extremo derecho gallego, que realizó una espectacular jugada individual driblando a 4 jugadores y tras realizar un fantástico caño en la frontal del área batió por bajo al portero visitante. Más tarde Joselu hacía el segundo y el partido quedaba finiquitado.
No cayó en la relajación el conjunto de Alberto Toril que quiere seguir acumulando victorias para llegar al play-off en la mejor forma posible. Fueron varias las ocasiones para marcar el tercero, pero el portero Rafa Ponzo estuvo soberbio bajo palos.
Si consiguió ampliar la ventaja a los minutos de la reanudación Jesé Rodríguez tras un buen pase de Joselu; el Castilla dejaba definitivamente liquidado el partido con toda la segunda parte por delante. El segundo equipo del Real Madrid se relajó y los asturianos crecieron hasta recortar distancias. Carvajal hizo el primero del Marino en propia puerta y a partir de ahí ambos equipos se limitaron a dejar pasar los minutos.
Como no, el árbitro quiso tener su cuota de protagonismo pitando una absurda cesión dentro del área madridista que Jony se encargó de transformar para poner el definitivo 3-2 en el marcador.
Nueva victoria del Castilla que una vez asegurado el título honorífico de campeón del grupo I cuenta ya los días para afrontar la eliminatoria de ascenso a segunda división.
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