'La Fábrica' blanca de porteros

La política del club es cara al respecto, el tercer portero siempre es canterano





No es nuevo en los merengues que el tercer portero del equipo sea un canterano. El Real Madrid, por su exigencia, siempre tiene que tener a los mejores jugadores del mundo, pero se intenta que en puestos, quizá, de menor responsabilidad como puede ser el de último guardameta del equipo, sea un chico de la cantera con ganas de aprender con los mejores.

Así es como comenzó la historia de un tal Iker Casillas en el Real Madrid. En la temporada 1999-2000, el del Móstoles comenzó esa temporada en el C, Tercera División, venía de ganar el Mundial Sub20 con España y su nombre ya empezaba a sonar con fuerza. En el primer equipo estaban Bodo Illgner y Bizarri, pero ambos se lesionaron y Toshack tiró del canterano para debutar, nada más y nada menos que en La Catedral, contra el Athletic.

Iker es el mejor ejemplo de que con trabajo y esfuerzo, y un poco de suerte, el sueño de triunfar de blanco es posible. No voy a enumerar todos los títulos que ha ganado el meta español, pero puede servir de ejemplo para los que empiezan siendo el último portero de la plantilla. Siempre hay que estar preparado y si llega la oportunidad, aprovecharla, como hizo Casillas.

Con el ex capitán como portero titular del Real Madrid, el club seguía subiendo canteranos al primer equipo para que fueran cogiendo experiencia. Es el caso de Carlos Sánchez. Formado en las categorías inferiores del club, dio el salto al primer equipo en la temporada 2001-2002. Por delante suya dos auténticos porterazos como Casillas y César, que se disputaron el puesto, sobre todo, ese año. Tres temporadas a la sombra, en los que apenas tuvo oportunidades, pero su paso por el Real Madrid le valió para hacer carrera.

Casillas y Diego López


Con la salida de Carlos en 2004, el club decidió darle la alternativa a otro canterano. Diego López. Un guardameta con unas cualidades extraordinarias. Bien por alto, bien con los pies y ágil en los mano a mano, pero era la mejor época de un Iker Casillas que se había ganado, con sus actuaciones, su condición de indiscutible. El gallego estuvo tres años como reserva, uno como tercer portero y los otros dos como segundo, siendo Cobeño, el tercero durante la temporada 2005-2006.

Con la llegada de Fabio Capello, Iker siguió siendo el titular, López el segundo y con la marcha de Cobeño, el italiano decide que Kiko Casilla, actual jugador del equipo, suba de la cantera y haga las labores de tercer portero durante el curso 2006-2007. Al finalizar esa temporada tanto Diego López como Casilla se marcharon, aunque, pasados los años regresaron.

El Real Madrid fichó en verano de 2007 a Jerzey Dudek como reserva de Casillas y para el puesto de tercer portero, como era habitual, apostaron por otro jugador formado en la casa merengue. Jordi Codina. Llegado al club en el año 2002, con la llegada de Schuster, el catalán dio el salto al primer equipo.

Tras dos años, Codina se marcha y el elegido, en esta ocasión es Antonio Adán. En diciembre de 2009 hizo su debut con el Real Madrid. Era un partido de Liga de Campeones. Dudek se lesionó y Pellegrini dio entrada al madrileño. Adán se mantuvo en el equipo hasta el año 2013, siendo el segundo portero de José Mourinho y dándole el puesto de tercer meta a Tomás Mejías, también criado en Valdebebas.

Desde entonces, Jesús Fernández, en la 2013-2014, y, el curso pasado, Pacheco habían sido los jugadores que habían completado el puesto de portero en el Real Madrid. Ahora le toca el turno a Yáñez. No es un reto fácil, de hecho muchos de los mencionados anteriormente no tuvieron al oportunidad de demostrar sus cualidades sobre el terreno de juego del Bernabéu, pero es un sitio en el que muchos profesionales les gustaría estar. A Yáñez le toca trabajar, esperar la oportunidad y, si llega, convencer.