Ese fue el pasaje más negativo para el mexicano aunque no el único. Y es que una vez más, la afición de los rojiblancos volvió a demostrar su poca deportividad e increpó al delantero del Leverkusen recordándole su pasado madridista.
En un momento del partido en el que Chicharito no llegó a alcanzar un balón, una parte de la afición del Atlético se puso a gritar a coro aquello de “vikingos no, vikingos no”. Una muestra de que la madriditis crónica de algunos no cesa ni aunque el Real Madrid no esté presente de forma directa en el terreno de juego.
Es obvio que en el Calderón todavía duele que un gol de Chicharito les eliminara de la Champions durante la temporada en la que el delantero mexicano defendió los colores del cuadro madridista. Ese gol fue una de las experiencias más bonitas en la carrera del delantero, como él mismo ha reconocido en varias ocasiones, y seguramente uno de los episodios más dolorosos de los rojiblancos ¡Qué malo es tener rencor!
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