Es el nombre propio de una carrera excepcional, que lo llevó a vestir además las elásticas de Real Madrid, Nápoli, Milan y Chelsea, y a jugar con Argentina los Mundiales de Sudáfrica 2010, Brasil 2014 y Rusia 2018.
Higuaín recibió críticas en muchas situaciones despiadadas y hasta burlas por los errores que vivió con la Selección, con la que fue subcampeón mundial en 2014 y también quedó en el segundo puesto en las Copas América de Chile 2015 y Estados Unidos 2016.
Durante cuatro campañas convivieron en el mismo vestuario madridista, francés y argentino. Larga etapa en la que compartieron minutos en el terreno de juego, firmando números estratosféricos. En esta época, Benzema marcó 89 goles, por 86 de Higuaín, aunque hay que tener en cuenta que el argentino estuvo de baja más de 4 meses, en 2011, tras pasar por el quirófano por culpa de una molesta hernia discal.
Con 25 años, en el mejor momento para un jugador profesional, tuvo claro que para dar un paso más en su carrera era muy importante cambiar de camiseta, pues junto a Karim jamás se ganaría el estatus de estrella que ahora sí tiene en Turín, antes en el Nápoles. (Cristiano ridiculiza a Higuaín en una prueba de velocidad)
El ex madridista ha realizado enormes temporadas en el Nápoles, marcando muchos goles y siendo decisivo para su equipo, aunque en los momentos más importantes sigue dejando muchas dudas, como le ha ocurrido siempre durante su carrera.
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