Siguen pasando las semanas y desde Barcelona siguen sin pronunciarse sobre los pagos a Negreira. Lo único que aseguran es que es una campaña orquestada contra ellos, aunque siguen sin dar explicaciones.
Sin embargo, el Bernabéu no se olvida de ello. Mientras esos pagos sí que están demostrados, lo que pretendían sacar con ellos no, lo que ha llevado el caso a la justicia. Pero el madridismo emite su propio veredicto.
Las gradas lo han demostrado en anteriores partidos, desde que salió a la luz el caso, y ante el Villarreal, cuando se anunciaron los nombres de los colegiados ya se escucharon los primeros pitos, aunque algo tímidos.
Pero con el transcurso de la primera mitad, Alberola Rojas quiso desentenderse del juego duro del Villarreal, perdonando varias entradas sin cartulina, y alguna que otra que no quiso ver.
Eso fue subiendo lo decibelios, hasta que en el minuto 36, Asensio se quedó tendido dentro del área del conjunto castellonense. Reclamaron penalti, y terminó desembocando en un ya habitual: "Corrupción en la federación".
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