Los blancos se quedaron con la miel en los labios

Los béticos se enfrentarán en la final al Deportivo de la Coruña


Amavisca, en la disputa de un balón




El Real Betis, después de descansar en la primera jornada y contemplar el juego de su rival, llegaba al choque mucho más descansado que los blancos. Sin embargo, la igualdad estuvo patente a lo largo del choque. El equipo bético, cimentado en una magnífica defensa, aprovechaba las ocasiones que tenía. Olí sigue teniendo el olfato goleador de antaño y aprovechaba cada oportunidad para marcar gol.

Pasados esos primeros minutos de tanteo, el encuentro entró en un fútbol control por parte de los dos equipos en el que el Real Madrid se sintió más cómodo. Pero el Betis no había venido a pasearse, había logrado proclamarse subcampeón de la Liga Placo. Cipri acercaba a los béticos, al que seguía un gol rápido de Víctor y otro más de Aurelio. El partido estaba vivo y más cuando Aurelio, de un espléndido zurdazo, ponía las tablas en el marcador.

Una segunda parte de completa igualdad

El guión del segundo tiempo no cambiaba demasiado con respecto al primero. Reinaba la igualdad, la lucha por el balón y la batalla cuerpo a cuerpo. Pero el Betis, poco a poco, fua haciéndose con el partido. Las apariciones de Pedro Jaén y Olí mataban a los blancos y los béticos tomaron una ventaja de tres goles superado el ecuador de la segunda parte.


En ese momento, el Real Madrid se volcó al ataque con toda la artillería. Cada acción era protestada, se peleaban los saques de banda y, tras los goles de Mesas y Batalla, se llegaba a los cinco minutos finales con 12 - 9 en el marcador. Un tanto de Dani puso emoción al choque pero el Betis supo defenderse a la perfección para colarse en la final de la Copa de España Vodafone en la que se enfrentará al Deportivo de la Coruña.