Paul Breitner, el 'pulmón' alemán

DC repasa la carrera de algunos de los mejores jugadores madridistas de la historia





Nacido el 5 de septiembre de 1951 en la localidad alemana de Kolbermor, Breitner perteneció a esa generación de poderosos futbolistas germanos que dominó en la década de los 70. Comenzó en las filas del club de su localidad natal para posteriormente firmar por el Freilassin como club puente antes de su fichaje por el Bayern Munich , donde se hizo con varias Bundesligas y la Eurocopa de 1972. Tras conquistar el Mundial de 1974, un 16 de agosto se compromete con el Real Madrid, que busca en él potencia y calidad para su centro del campo.

Paul Breitner era el prototipo de centrocampista que gustaba a Miljan Miljanic. Fuerte bregador con presencia y potencia física. En ocasiones, su tremenda fuerza le jugaba malas pasadas y perdía balones o cometía errores en momentos inoportunos.

Vino a acompañar a su compatriota Gunter Netzer y juntos se hicieron dueños y señores del centro del campo blanco  y conquistaron dos Ligas consecutivas en 1975 y 1976 y desbancando al Barcelona del dominio en el fútbol nacional, practicando un fútbol eminentemente físico, trabajado y muy pocas veces visto en la época.



Un mal año y adiós

Sin embargo, el ‘matrimonio’ del Real Madrid con Breitner no duraría mucho más. Su tercera temporada fue desastrosa tanto en lo personal como en lo colectivo y el conjunto blanco decidió no prolongar su relación. Así, después de 100 partidos oficiales y 10 goles, el centrocampista  regresó a su país para jugar en el Eintracht y después en el Bayern, donde se retiró en 1983.



Quizá Breitner no pasará a la historia por ser uno de los mejores centrocampistas en los más de 110 años del conjunto blanco, pero lo que no se puede negar es que fue un elemento necesario para cambiar la tendencia ganadora y para dar al club cierta relevancia internacional.