El equipo madridista llegaba a la cita con un 2-0 conseguido en el Bernabéu pero con el temor casi innato que ha tenido el conjunto merengue en tierras alemanas. Para más inri, los de Heynckes tenían enfrente a un campeón de Europa que buscaba la remontada para repetir final.
Pero allí apareció el ‘mariscal' de la medular; Fernando Carlos Redondo Neri dirigió el choque a su antojo, marcó los ritmos y condujo, sin prisa pero sin pausa, al Madrid a la que sería décima final de la Copa de Europa.
Un partido que será siempre recordado por toda la afición madridista por ser el día en el que desapareció el complejo en Europa. El Madrid seguía sin ganar en Alemania, pero alcanzaba un sueño que llevaba buscando 17 años, y todo, gracias a Don Fernando Redondo.
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