Un antiespañol en el palco del Calderón

¿Qué hacía Laporta en los actos del centenario de la Federación Española?





Y no creemos que fuera precisamente a animar, cual Manolo el del bombo, a la selección española. Es más, hay quien dice que se alegró más por el tanto marcado por el insulso Messi (una vez más el fútbol vuelve a mostrar la mentira mediática que se he creado en torno a este futbolista) que por los dos conseguidos por el madridista Xabi Alonso, y que su presencia se debería más a una salvaguarda de los intereses del Barcelona en los próximos meses del campeonato liguero, y más aún cuando hay un Barcelona - Real Madrid en apenas dos semanas.

LAPORTA, ASUSTADO ANTE LA VISITA DEL MADRID

Porque a Laporta, viendo el partido de Messi, y escuchando de boca de Jorge Valdano y Emilio Butragueó que Cristiano Ronaldo va a estar recuperado para el choque del Campo Nuevo, le tuvo que entrar una depresión de caballo. Primero porque el argentino no ha dado pie con bola en este inicio de temporada. Y no valen excusas sobre lo mal que juega la selección de Maradona, o el juego poco combinativo de la albiceleste. Los grandes futbolistas tienen que demostrar que lo son con toda clase de técnicos y circunstancias, al igual que hicieron otros grandes del fútbol como Ronaldo, Zidane, Pelé e incluso Maradona. Messi en este aspecto ha fracasado, y Guardiola no puede inventarse ninguna excusa a este respecto.

Lo segundo es que el anticristo del barcelonismo, Cristiano Ronaldo, va a estar listo para jugar el gran clásico del 29 de noviembre. Mucho se ha hablado de la crisis de juego y resultados del Madrid de esta última semana, algo que casualmente ocurrió desde que el salvaje Diawara le crujiera el tobillo con una salvaje entrada, y que el inepto Queiroz pusiera en peligro su carrera deportiva alineándole en el partido ante Hungría. Pero a pesar de su ausencia, el Madrid sólo está a un punto del todopoderoso Barcelona, y con el luso sobre el campo las opciones de victoria de los madridistas crecen como la espuma.


SU CONFIDENTE VILLAR, DISPUESTO A AYUDARLE

Ante este panorama Laporta, que ya se ha puesto en contacto con Dodot para reservar un cargamento de 90.000 pañales para dentro de dos semanas, se ha puesto manos a la obra para evitar lo inevitable. Y su presencia el sábado en el Vicente Calderón es para estrechar, aún más si cabe, los lazos con su eterno amigo Angel María Villar. Hay que hacer lo que sea para que el Madrid no gane en el Campo Nuevo, y en el trabajo de los despachos, Laporta se maneja mejor que nadie (que se lo pregunten a Flavia Massoli). Porque, si no es por esta razón, ¿qué hacía un antiespañol festejando los actos del centenario de la Real Federación Española de Fútbol?...