Y es que este tal Javier opina que ha sido la presencia de Lapuerta como presidente del Barça lo que ha impedido que el Real Madrid haya perdido la hegemonía de Europa: “No diré que Florentino lo haya hecho mal. En la construcción, dos lo pueden hacer bien. En el fútbol, sólo uno puede quedar primero. Ha tenido la mala suerte de que un club lo ha hecho mejor y hemos ganado nosotros. Hay tres tipos de Florentinos. Está el Florentino antes del 2003. Luego, el Florentino de después del 2003 y el Florentino 3.0. Desde que ha llegado Joan Laporta, Florentino no ha ganado nada”.
El tal Javier sacó también su vena prepotente (para que luego digan que eso lo inventaron en el Real Madrid) y aseguró, posiblemente para dar lástima no se sabe a quien, que le hubiera gustado ver una final Barça - Madrid en el Bernabéu: “Me hubiera hecho gracia jugar contra el Madrid la final de la Champions, aunque es un equipo peligroso a un partido. Desgraciadamente, esto ya no puede ser y me quedo con la lección de cómo administrar un club".
“Hay dos aficionados del Barça. Los valientes que no tienen miedo del riesgo y querían el Madrid en la final. Éstos estarán tristes porque hubiera sido glorioso ganar al Madrid en la final. Luego están los otros que, entendiendo que el Madrid puede ganar a un partido, ya les va bien que un club poderoso se quede eliminado. Seas de los que te gusta el riesgo o de los que no te gusta el riesgo, han de estar contentos de que, con lo que pasó ante el Lyon se demuestra que el modelo de ir por el mundo comprando jugadores en un equipo sin consultar con los técnicos, con el presidente decidiendo lo que se hace, sin saber quién será el entrenador, incluso, eso no funciona”.
Eso sí, el mencionado personaje (Jaiver creo que se llama) se encargó también de cubrise las espaldas por si el que cae eliminado es el Barcelona la semana que viene: “Igual la semana que viene nos eliminan a nosotros pero esto no va así. Desde el 2003 hemos ganado dos Champions mientras el Madrid no ha pasado de octavos. Igual sí que esto de gastarse tanto dinero, de no tener una estructura, de no hacer caso a los técnicos y de pensarse que el presidente decide porque sabe más que nadie, igual sí que esto no es la manera de hacer. Lo digo también como barcelonista que creció en un Barça que hacía esto. Teníamos a Maradona o Schuster. Primero, Cruyff. Teníamos al mejor del mundo y ganábamos poquísimo”.
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