Tras los cerca de 24 millones de euros ingresados por levantar el dorado trofeo en Johannesburgo, la RFEF tiene previsto, según El Confidencial, empezar a ingresar otros dos millones por cada partido que juegue la selección española. Se trata de un caché que sólo comparten otras grandes del fútbol internacional como Brasil o Argentina, por lo que el juego de los Casillas, Xavi, Iniesta y compañía ya cotiza a precio de oro en todo el mundo.
Por el momento, señalar que el amistoso de este miércoles ante México 'únicamente' permitirá unos ingresos para la federación de un millón de euros. Hay que tener en cuenta que su presidente, Ángel María Villar, pactó el choque antes de la disputa del Mundial, por lo que el dinero a cobrar pertenece al caché anterior de la selección, el que correspondía a su estatus de campeón europeo. Un partido que se espera que no sea el último de 'La Roja' en América a corto plazo, ya que los de Vicente del Bosque también jugarán en Buenos Aires frente Argentina el próximo 7 de septiembre.
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