"Espero jugar hasta los 42 años"

Roberto Carlos quiere ser eterno





"No puedo adivinar el futuro, pero espero jugar hasta los 40-42 años", señala el futbolista, que fichó la pasada semana por el club de la república norcaucásica rusa de Daguestán, en una entrevista publicada hoy por el diario Sport-Express. Roberto Carlos reconoce que su legendario disparo con la pierna izquierda es "más débil" que antaño, pero matiza que "apenas ha perdido velocidad". "Por supuesto, seguiré subiendo al ataque. Aún puedo correr 7-8 kilómetros por partido", dijo el lateral, que se encuentra concentrado con sus nuevos compañeros en Turquía.

El ex jugador del Real Madrid, equipo con el que ganó tres Ligas de Campeones, insistió en que el dinero no fue el factor decisivo para regresar a Europa. "Por supuesto, el dinero es un estímulo, pero no el único. Para mí lo importante es participar en un proyecto interesante y ambicioso. El Anzhi es un nuevo desafío del destino", apuntó.

Roberto Carlos, que fue campeón del mundo con su país en 2002, no tiene miedo a las temperaturas extremas, sea el calor sofocante de Brasil o el frío gélido de Rusia. "El clima no me asusta. La temperatura más baja a la que he jugado fueron los 20 grados bajo cero de Kiev. Y en Brasil he participado en partidos con 36 grados de calor", indicó. Sea como sea, el lateral zurdo descartó un posible retorno al equipo nacional brasileño: "La selección necesita jugadores más jóvenes".

Roberto Carlos aseguró también que le "encanta" el caviar negro que se extrae del esturión, pez que los pescadores daguestaníes capturan en el mar Caspio, y se mostró dispuesto a aprender la lengua rusa. "Creo que un futbolista debe ser capaz de expresarse en el idioma que se habla en el equipo y en el país en el que juega. Más aún cuando Rusia tiene una tradición cultural tan rica", apuntó. El jugador también tuvo un recuerdo para su ex compañero Ronaldo, que anunció la pasada semana su retirada tras sufrir numerosas lesiones.


"Lamentablemente, decidió acabar con el fútbol. Respeto su decisión. Él considera que su tiempo ya pasó y ha llegado la hora de dedicar más tiempo a sus seres queridos", comentó. El brasileño, que se desvinculó del Corinthians brasileño tras recibir amenazas de muerte, jugará las dos próximas temporadas en el Anzhí, equipo que quedó la pasada temporada en el puesto undécimo de la liga rusa.