La caverna quiere ver a Florentino arruinado

Los culés intentan desviar la atención de sus problemas económicos e institucionales





Es tan grande el odio que genera Florentino Pérez, el mismo hombre que arrebató a Figo de las manos culés, que en Barcelona son capaces de manipular cualquier tipo de información con el fin de hacerla aparecer como una realidad inquebrantable. Se sigue echando mano al manido discurso de la política para acusar al presidente del Real Madrid de haber recibido favores de los bancos, cuando la realidad es que si el club blanco ha recibido créditos (como todos los clubes) ha sido porque su solvencia permitía la confianza en que los podría pagar cuando tocara.

 

Las desgracias nunca vienen solas y al presidente Pérez parecen perseguirle con saña en los últimos meses. Si en el plano deportivo Guardiola y el Barça le han amargado su segundo mandato, ahora aparecen también negros nubarrones económicos en su futuro como presidente blanco. La crisis de Bankia pone en serio peligro su estrategia a corto plazo como jefe de la Casa Blanca, porque de la mano de Bankia ha dado rienda suelta hasta ahora a sus caprichos financieros comprando sin dinero porque para eso estaba el banco amigo, el banco de Esperanza Aguirre, el banco de Aznar, el banco de Rato, el banco de los amigos del PP.

 

Si con poner en duda la honestidad del presidente del club de Concha Espina no había bastante, el artículo va más allá al insinuar que el Real Madrid no tendrá dinero para pagar los fichajes de Cristiano Ronaldo y Kaká. De hecho, se llega a decir que el club blanco sólo ha pagado intereses hasta el momento, dando a entender de manera manipuladora que no hay dinero para afrontar el pago. Sin embargo, la realidad es que el acuerdo con Bankia implicaba comenzar a pagar 25,5 millones por año a partir del presente verano. No se dejen engañar. 


 

Cuando Florentino Pérez ha querido tener a Cristiano Ronaldo y a Kaká, los ha comprado sin pestañear aunque no dispusiera de dinero para hacerlo. Tenía a Caja Madrid, ahora Bankia. El coste de ambos jugadores ascendió a 162 millones y para hacer frente a la operación Pérez no tuvo más remedio que solicitar a Bankia un crédito de 76 millones que vence en julio de 2014 y que, tres años después, todavía no ha empezado a ser pagado. A día de hoy el Madrid no ha pagado un sólo euro del principal y únicamente ha ido abonando semestralmente una parte de los intereses del préstamo, lo que supone una enorme sangría para las cuentas del Real Madrid.

 

Continuando con el mismo discurso pesimista, se sigue hablando de las garantías económicas que puso el Real Madrid para llegar a un acuerdo con Bankia. Garantías que, digan lo que digan, son suficientes. Es más, resulta curioso que desde Barcelona tengan valor para decir semejantes bobadas al respecto de la economía blanca y sin embargo se callen al respecto de la patética gestión de un Laporta que dejó en la ruina al FC Barcelona.

 

Florentino ofreció como garantía el contrato de cesión de derechos audivisuales suscrito con Mediapro, un contrato que también debe ser acogido con cautela habida cuenta la delicada situación por la que atraviesa esa compañía. Pero, como ha podido verse recientemente, Bankia nunca fue quisquillosa con Florentino Pérez exigiendo garantías y éste ha podido beneficiarse de un trato de favor con dicha entidad financiera para cumplir sus sueños como presidente del Real Madrid por su condición de cliente VIP.

 

Finalmente, el artículo intenta tocar la fibra del madridismo al asegurar que el presidente del Real Madrid se estaría planteando convertir el club en una Sociedad Anónima Deportiva, con el fin de tener poder de llamada a los grandes capitales y así inyectar el dinero necesario para hacer viable la supervivencia del proyecto. Todo ello porque la crisis económica amenaza a una entidad bancaria que ni mucho menos está ligada al Real Madrid más que por un dinero que el club blanco podría abonar de la manera más sencilla posible.

 

Lejos de afrontar una política de austeridad y recortes, Florentino prefiere huir hacia adelante en lo que se interpreta como una loca carrera sin más salida que la de buscar la conversión del club en sociedad anónima de manera que grandes capitales puedan entrar en él para tomar el control e inyectar el dinero necesario que permita su viabilidad. El futuro pinta mal sin la complicidad de Bankia para satisfacer los caprichos en forma de fichajes y tapar los agujeros. Los tiempos ya no están para alegrías y los grandes bancos ya no actúan por amiguismo ni por conveniencia política.

 

Visto lo visto, parece que en Barcelona están muy preocupados con la salida de Guardiola, los problemas institucionales y el salto de calidad que ha dado el Real Madrid esta temporada. Tanto que intentan desviar la atención de la manera más penosa. Seguramente, Florentino se haya echado unas risas leyendo tamaña cantidad de sandeces...