En Cataluña, encantados con la politización del clásico

Felipe Puig, consejero de interior de la Generalitat 'anima' a llevar la bandera separatista





"Nadie se debe sentir ofendido si se sacan esteladas o ‘senyeras'. Es el sentimiento de la mayoría de los catalanes y se debe respetar". Así de rotundo se mostró Puig, quien recalcó que la ‘estelada' no contiene ningún mensaje excluyente ni xenófobo.

Una mentira más de la clase política catalana que intenta convertir el choque entre azulgranas y blancos en algo parecido al día de la Independencia catalana. Puig no se cortó y siguió erre que erre: "La estelada representa el anhelo de libertad de Cataluña y por ende se debe respetar. No habrá problemas".

De esta manera, queda claro que mañana en el Camp Nou se vivirá algo más que un partido de fútbol entre dos grandes equipos. Los políticos catalanes con el consentimiento y el apoyo del Barça, lo han afeado y convertido en un sainete separatista.