España Records

Capdevila abrió el marcador; Villa hizo doblete y Senna marcó con un obús desde 28 metros





Esta España es insaciable. Está haciendo historia y rompiendo moldes con números y estadísticas que la señalan hoy por hoy como una de las tres potencias del fútbol mundial. Es número uno en el ranking FIFA, suma 25 partidos consecutivos sin perder, sexto partido sin ecajar un gol, con Casillas a un paso de batir el récord del tandem Zubizarreta-Buyo y, además, resulta que lleva desde 1993 sin perder un partido de fases de clasificiones para los Mundiales. Vamos España Records.

Armenia supuso un plato ligero para una selección que se ha acostumbrado a "gañar y gañar", en un partido plácido que no tuvo más complicación a partir del minuto 6 en el que rompió el marcador con el 1-0. Ganó el encuentro en la primera parte, en la que asumió algunos riesgos a pesar de garantizar el triunfo con el 2-0 a los 15 minutos, y en la segunda apostó por el fútbol control y si caía algún gol, pues mucho mejor. Y cayeron dos merced a ese fútbol de seda y talento que convierte este deporte en una fiesta.



Adiós a las tensiones

Vivir en permanente tensión envejece y desgasta y esta selección vivió un verano de éxitos pero con la tensión desatada en una Eurocopa inolvidable pero agotadora. Y como le parecía poco aquello, hace cuatro días volvió a rememorar aquellos episodios con un partido tenso y un triunfo mínimo, pero al menos un triunfo, ante Bosnia. Una experiencia que valió la pena porque se ganó, pero que no es recomendable para la salud ante rivales menores. El segundo en la lista de esta clasificación para el Mundial 2010 era otro equipo duro, menor, pero con un perfil similar al bosnio. Y Del Bosque decidió cambiar y apostar por un once con menos fútbol pero con más gol. El salmantino acertó y se ventiló el partido en 15 minutos, justo lo que tardó en ponerse 2-0.

Armenia dio un metro de ventaja

Menos toque y desplazamientos más largos que sirvieron para acular a un rival con cara de perro en las marcas. Paralelas aéreas a los delanteros desde el centro del campo o aperturas por la banda para agrandar el campo. Pero Armenia no se ajustó el cinturón un agujero más como hizo Bosnia. Dejaban un metro que resultó fatídico para sus intereses, porque enfrente había jugadores de talento como Iniesta. El albaceteño estaba en casa y se inventó un pase en paralelo sobre Capdevila, que entraba sólo por la izquierda a la altura del área pequeña, y fusiló a placer a Berezovsky.

El gol dejó grogui a los armenios, que perseguían sombras rojas al desabrocharse otro agujero del cinturón en su intento de dar un paso adelante. Una mentalidad que aplastó su moral con el 2-0. Una jugada en la que Iniesta intentó desbordar a un rival entrando por el vértice izquierdo del área: el balón quedó suelto, lo cazó Villa que marcó los tiempos para colocarlo al palo contrario.

Sació el apetito

El marcador destensó el partido y los armenios ahora si encontraron espacios para acercarse al aréa español y poner a prueba al mejor portero del mundo. Ataques en acciones individuales con cierto peligro y que no acabaron en más precisamente por esa obsesión de finalizar cuanto antes. Fueron los mejores minutos visitantes, pero los nuestros volvieron al partido para quitarles la pelota y atacar por oleadas. Incluso pudo engordar la diferencia divirtiéndose, pero el hambre ya no apretaba y el encuentro se fue al descanso.



La selección sabía que tenía que seguir viva, y se adueñó del balón, quizá una exigencia de Del Bosque, para que no lo olieran los armenios. Puso más pausa, aseguró más el esférico y lo movió por las bandas con paciencia. Xavi recobró el mando y el partido se convirtió en un monólogo español, que incorporó a Xabi Alonso sacrificando a Güiza. El "turco" se fue del campo mosqueado, pero no tenía motivos porque no la olió. Un medio por un delantero era un claro mensaje de Del Bosque de que quería control, aunque diez minutos después retirara a Cazorla e hiciera debutar a Bojan. Poco después, y con Xabi Alonso caliente, el mejor jugador de la Eurocopa, Xavi, se ganó la ducha a cambio de un recambio de talento como es Cesc, que define el armamento que tiene este equipo.

Villa pudo clavar el tercero, pero si hace cuatro días ante Bosnia marcó un gol imposible, en esta ocasión y con una situación parecida, estrelló el balón en el palo. Fue un aviso del Guaje, que poco después engordaba el resultado tras recibir dentro del área, y colocar la pelota lejos del alcance de Berezovsky. Un gol que alegraba el esfuerzo de los nuestros y Senna, siempre en una labor oscura y sacrificada para el equipo, se animó y largó un zapatazo desde 28 metros que ponía el 4-0.



LA FICHA

España: Casillas, Ramos, Puyol, Albiol, Capdevila, Senna, Xavi (Cesc, 72"), Iniesta, Cazorla (Bojan, 64"), Villa y Güiza (Xabi Alonso, 55").

Armenia: Berezovsky; Hovsepyan, Dokhoyan, Alkesalyan, Tadeskoyan; Voskanyan, Khachatryan, Pachajyan, Karanyan (Karanyan Arma, 51"); Mikhitrayan y Melkonyan.

Goles:

1-0 (6"): Capdevilla recibe un pase genial en paralelo de Iniesta que le deja solo ante Berezovsky

2-0 (16"): Villa recoge un rechace dentro del área y cruza al palo contrario.

3-0 (78"): Villa culmina dentro del área a pase de Xabi Alonso.

4-0 (82"): Senna, de tiro desde 28 metros.


Árbitro: Tony Asumaa, de Finlandia. Tarjeta amarilla a Alkesalyan (27") y Pachajyan (80")

Estadio: Carlos Belmonte