Cristiano contra Bale o el partido del corazón partido

---

Hacer historia
Las dos grandes estrellas del Real Madrid, Cristiano Ronaldo y Bale, se enfrentan este miércoles por un puesto en la gran final de la Eurocopa y, quizá, por tomar ventaja en la carrera del Balón de Oro. Pero sobre todo se miden con la intención de hacer historia para sus respectivos países, sobre todo el galés ya que esta es la primera participación de Gales en un campeonato continental de naciones.

Un sueño cumplido
El Stade de Lyon albergará un partido que todo el madridismo esperaba cuando se conoció cómo quedaba el cuadro de eliminatorias de la Eurocopa. Muchos deseaban que Portugal y Gales fuesen superando partidos para enfrentarse en el último duelo antes de la final, aunque es verdad que pocos confiaban en que pudiera ocurrir por cómo habían arrancado los portugueses y porque los galeses eran los debutantes en la competición.

Vida más allá de Cristiano y Bale
Sin embargo, Gales y Portugal se han empeñado en recordar que hay vida más allá de Cristiano Ronaldo y Bale, aunque para los madridistas es complicado pensar en eso, sobre todo porque Pepe, que está haciendo un campeonato sensacional, será duda hasta el último momento por problemas físicos. Eso sí, parece que el central forzará para ayudar a su país a disputar una nueva final de la Eurocopa.

Bajas importantes
Eso sí, aunque Pepe se recupere Portugal seguirá teniendo al menos una baja, la de William Carvalho, sancionado por acumulación de tarjetas. Pero es Gales la que cuenta con las ausencias más importantes ya que también por sanción no podrán contar con Ramsey y Davies, dos de sus tres pilares junto a Bale. Es por eso que el madridista deberá multiplicarse para seguir haciendo historia.

A por la final
Con un billete para la final en juego Cristiano Ronaldo y Bale aparcarán su amistad durante noventa minutos, o algo más si hay prórrogas y penaltis, y se centrarán en llevar a Portugal o Gales a una final de Eurocopa para intentar levantar el primer título internacional para sus respectivos países. Mientras, el madridismo estará con el corazón partido pero deseando disfrutar de un auténtico duelo de titanes.