1. Ya empiezan sus mensajes de prepotencia
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Hoy, unos meses después, la plantilla del Barça se ha visto apuntalada con la llegada de refuerzos que, salvo en casos muy concretos, no alterarán el dibujo del once titular barcelonista. Pero sí que han ampliado, y de qué manera, el fondo de armario de un equipo que, ahora sí (y pendiente de alguna nueva incorporación), podrá dosificar con garantías a sus piezas clave. Dicho lo cual y vista la solvencia con la que el Barça cerró su doble compromiso de Supercopa de España ante el Sevilla, a uno se le antoja difícil que algún equipo logre desbancarlo de su actual trono. |
Respuesta del Infiltrado: Podemos 'comprar' la reflexión de Luis Enrique de que el Barcelona es el favorito a ganar la Liga por ser el actual campeón. Pero lo que no aceptamos es que se dude de que clubes como el Real Madrid o el Atlético estén perfectamente capacitados para ganarle esta temporada el título. El club blanco es el actual campeón de Europa y el curso pasado se quedó a un pasito de acabar alzando la Liga a pesar de haber tenido una tremenda desventaja al principio de la segunda vuelta. Además, en esta ocasión contará con el trabajo de Zidane desde el primer día, lo que le hace aún más peligroso. Así que en el barcelonismo harían bien en hacer estos análisis previos con más humildad y en desterrar totalmente una prepotencia que puede acabar convirtiéndose en su perdición.
2. El Barcelona, ¿el único club con problemas?
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El parte de la enfermería del Barça para estos primeros partidos oficiales cuenta que Ter Stegen, Mathieu, Iniesta y Mascherano andan lesionados y no estarán para el debut de Liga ante el Betis en el Camp Nou. Cuatro jugadores de peso que alteran los planes iniciales de Luis Enrique. El central argentino ha sido el último en caer en la Supercopa de España. De todas formas, el técnico asturiano está acostumbrado a arranques convulsos. En sus dos primeras temporadas, sufrió numerosos contratiempos de inicio que alteraron su arranque y puesta en marcha. |
Respuesta del Infiltrado: En Barcelona hablan como si su equipo fuera el club con más mala suerte del mundo. ¡Pobre Luis Enrique que lleva tres años sin poder tener a toda su plantilla desde el primer día! ¿Han mirado acaso al resto de equipos de la Liga? Porque si lo hicieran probablemente se darían cuenta que lo normal en el fútbol es que los clubes empiecen la temporada con lesionados y no pocas bajas. Y el mejor ejemplo es el Real Madrid, que está a día de hoy peor que ellos con la ausencia de hombres tan importantes como Benzema, Cristiano, Keylor Navas, Coentrao o Pepe.
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3. Luis Enrique no quiere ni ver al Madrid... pero bien que se acuerda de él
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Luis Enrique aprovechó dicha superioridad moral del Barça para lanzar un nuevo dardo 'envenenado' a su exequipo, el Real Madrid. "Quien parte como favorito es el campeón, por una cuestión de respeto. Pero todos partimos con los mismos puntos, hay grandes clubes que llevan años sin ganar ligas y seguro que apretarán", dijo el entrenador haciendo referencia al balance de los últimos ocho años, en los que el Barça suma seis Ligas por solo una del Real Madrid (2011/12). |
Respuesta del Infiltrado: La ambivalencia de Luis Enrique en lo que respecta al Real Madrid es bastante curiosa. Por un lado huye de todo lo que parezca 'blanco' por el dolor que le causa haber defendido durante cinco años la camiseta del Real Madrid. Pero por otro no duda de vez en cuando en lanzar 'dardos envenenados' al actual campeón de Europa, demostrando que en el fondo tiene tanta 'madriditis' como muchos otros culés. Aunque en el fondo esto tampoco debe preocupar al madridismo, sino más bien todo lo contrario. Y es que con estas referencias el asturiano solo demuestra que el equipo madrileño le quita el sueño y que teme que esta pueda ser la temporada en la que vuelva a hacerse con la Liga.
4. Un 'ADN' apolillado
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Empieza una Liga con Madrid y aún más el Atlético como grandes rivales de un Barça mejor que meses atrás en pos de la séptima Liga en nueve años y la tercera seguida. Solo dos veces en toda la historia ha alcanzado dicho hito del mismo modo que nadie ha retenido la Champions, lo cual dice mucho de su dificultad. Como que solo el Barça haya ganado dos tripletes o que en mayo firmara su séptimo doblete y el segundo seguido por vez primera en 64 años. Todo cuesta pero el Barça peleará por todo una vez más con un fútbol que sigue enamorando pese a ciertas voces que discuten aún el estilo atractivo y ganador de Luis Enrique. El asturiano cuida el estilo Barça y quiere mantenerlo. ¿O no la sacan bien Umtiti y Digne atrás y la tocan mejor André Gomes y Denis en la medular? |
Respuesta del Infiltrado: Pasan los años y siguen con la misma historieta. "El 'ADN' Barça". Una expresión que empezaron a usar en la época de Rijkaard, que desgastaron en la etapa de Guardiola y que todavía hay algunos atrevidos que siguen usando. Pero, ¿en qué se parece el Barcelona de Luis Enrique al de Pepe? Porque nosotros diríamos que muy poquito, por no decir nada... Y es que ahora resulta que Umtiti, Digne y André Gomes son unos 'jugones' que llevarán el fútbol culé a su máxima expresión. Desde luego, el que no se ilusiona aquí es porque no quiere, pero ya estamos nosotros aquí para rebajar esa euforia ridícula que les parece estar invadiendo en pleno mes de agosto tras unos refuerzos bastante discretitos por su parte.
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5. El Barcelona ya no confía en sus promesas
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El filial blaugrana lo hará con una plantilla muy cambiada que destaca por el hecho de que los canteranos son minoría, una circunstancia poco habitual en el segundo equipo. De hecho, Gerard López puede presentar ante el Atlético Saguntino un once con José Aurelio Suárez (realizó el último entrenamiento del primer equipo antes de medirse al Betis junto a Kaptoum), Palencia, que es el capitán, y Carles Aleñá (ha realizado parte de la pretemporada junto a Luis Enrique) como únicos jugadores que han pasado por el fútbol base. En el caso de Gumbau, uno de los veteranos de la plantilla, llegó procedente del Girona directamente al Barça B. |
Respuesta del Infiltrado: Puede sonar duro, pero el Barcelona no le tiene fe a sus jóvenes promesas. La temporada pasada el Barcelona B coqueteó con el descenso a Tercera en la primera vuelta y el club se vio obligado a fichar a futbolistas veteranos para salvar la papeleta. Y parece que este año ese miedo al fracaso va a continuar en el club, pues en vez de seguir apostando por los futbolistas jóvenes han preferido traicionar el concepto de su filial como equipo de formación para convertirlo en un lugar plagado de jugadores experimentados que no tienen ninguna opción de llegar algún día al primer equipo.
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