El Barça tiene suerte con la sanción de Messi y encima quiere presentar alegaciones

La reunión del organismo seguramente se producirá el martes de esta semana. En ella, Competición debe valorar la agresión de Messi a Villalibre. Si la considera grave el castigo puede ser de tres partidos, mientras que si cree que es falta leve, solo sería sancionado con dos partidos a ser cumplidos en los encuentros de Liga y Copa del Rey.

El colegiado Gil Manzano redactó el acta de forma muy favorable para el argentino eliminando la palabra sanción que supondría más partidos y poniendo lo siguiente: “Messi golpeó a un contrario con el brazo haciendo uso de fuerza excesiva estando el balón en juego pero no a distancia de ser jugado”.

El Barça querrá defender a su capitán y alegarán que Messi es el primero que recibe un impacto en el choque con Villalibre, por lo tanto, lo del argentino fue una reacción a una acción del delantero del Athletic. Otro de los motivos que alegarán es que no le golpea en el rostro y que su reacción es para deshacerse de él para impedir que bloquee su progresión hacia el área rival en una jugada de ataque.

La suerte que tiene Messi es que es su primera expulsión en 753 partidos con el Barça, lo que el Comité de Competición interpretará que no es un jugador violento ni con antecedentes en el empleo de la violencia en el juego. Eso hace que la sanción sea la mínima dentro de los parámetros. (Vergüenza con el doble rasero en la sanción de Messi si recordamos la de Cristiano)

Lo vergonzoso es que el FC Barcelona quiere abusar de su inmunidad e intentar proteger más a su futbolista. Messi debería haber recibido una sanción ejemplar de cuatro partidos mínimo por agresión. Veremos finalmente que sanción recibe y si el conjunto culé decide recurrir.