Los distintos organismos del mundo del fútbol echan balones fuera y se mantienen en su postura inicial. Solo Estrada Fernández, el árbitro más valiente de todo el CTA, fue el único decidido en querellarse contra Enríquez Negreira y el Barçagate. Los demás, silencio cómplice y al compás de un mensaje: dejar trabajar a la Fiscalía.
La propia Fiscalía ya habría actuado en oficio, tal y como explican en El País, y ya habría denuncia por "corrupción continuada en el mundo del deporte", según explican en el citado medio.
La denuncia va contra el FC Barcelona, el propio Enríquez Negreira y Josep María Bartomeu. Los señalan como responsables de un delito que va contra la deportividad y las penas de cárcel van de los 6 meses a los 4 años.
El mundo pide una sanción dura
El nombre de Joan Laporta no aparece en esa denuncia, pese a ser el presidente actual, pero sí que quiso salir al paso del asunto lanzando su particular mensaje: "El Barça nunca ha comprado árbitros", matizó.
Ahora, vista la denuncia de la Fiscalía, habrá que ver si finalmente hay descenso administrativo en Liga o hay una retirada de títulos por ese tiempo en el que el Barça y Negreira, presuntamente, colaboraron y fueron de la mano durante más de una década.
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