Gracias al quinto gol de Sydney Leroux en el torneo, las estadounidenses estarán por segunda vez en su historia en el partido decisivo, esta vez frente a las actuales campeonas de la categoría. Los dos equipos mostraron un juego veloz desde el comienzo. Sin embargo, Alemania estuvo menos precisa a la hora del manejo del balón mientras que su rival se mostraba más seguro a medida que corrían los minutos.
Estados Unidos logró finalmente plasmar su dominio en la red a los 21 minutos cuando Nikki Washington hizo gala de su velocidad por la derecha y mandó un centro perfecto para la llegada de Leroux, quien se estiró para anotar el merecido 1-0. La misma Leroux estuvo a punto de anotar el segundo, pero su intento salió desviado por poco.
Después del descanso, las alemanas modificaron la táctica, apostando a un más ofensivo 4-3-3. No obstante, Estados Unidos mantuvo el control del juego, sobre todo por la ventaja que sacaba en los duelos uno contra uno. Su arma más peligrosa siguió siendo Leroux, quien primero erró un cabezazo y luego no pudo conectar un gran pase de Alex Morgan.
A los 70 minutos, Alemania tuvo su primera gran oportunidad, y fue gracias a un remate de media distancia ejecutado por Sylvie Banecki, detenido con seguridad por Alyssa Naeher. Doce minutos después probó suerte su hermana gemela Nicole, pero esta vez el balón salió desviado.
Las europeas buscaron una y otra vez la manera de romper el cerco defensivo estadounidense pero ante la falta de resultados debieron seguir intentando con remates lejanos, que siempre terminaron en las manos de la sólida Alyssa Naeher. De esta manera, Estados Unidos terminó por frustrar a Alemania, imponiéndose por la mínima cuenta en el resultado, pero dando muestra de solidez colectiva que pone a sus chicas a tiro de la segunda corona de la categoría.
La final se jugará el próximo domingo, a partir de las 18:30 horas (22.30 hora española) horas en el Estadio Municipal Bicentenario de La Florida, en Santiago.
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