El entrenador español explotó afirmando, refiriéndose al Manchester United, que "decían que somos una amenaza. Ahora que saben que lo somos, utilizan juegos mentales. Cuando se tiene el control de todo; hablamos de juegos psicológicos si estás al mismo nivel que los otros y, entonces, desde ahí, puedes demostrar que tú eres más inteligente".
Una declaración ambigua de Benítez en un primer momento, aunque posteriormente clarificó los términos: "Cuando se tiene el control de todo y tu consejero delegado (David Gill) tiene poder en la federación de fútbol (donde ocupa un cargo) y cosas así, entonces no hay que hablar de juegos mentales". "¿Existe un conflicto de intereses con David Gill en la federación de fútbol? Este es otro hecho. Es un hecho el que una persona tenga mucho poder y control y tenga, además, muchísimos compromisos con la FA. Para mí, todo esto es muy raro".
Benítez no quiere que le pisen el terreno y quiere que su Liverpool sea respetado después de tanto tiempo intentando estar en la cabeza de la competición. Incluso, Arsene Wenger, técnico del Arsenal, con el que Benítez guarda una buena relación, se mostró “sorprendido” por las palabras de Benítez: "Los comentarios de Benítez fueron una gran sorpresa porque normalmente es un hombre tranquilo. No se de qué va esto ni quiero inmiscuirme, no es mi labor. Si Ferguson, Benítez o quien sea hace algo mal tiene árbitros alrededor que hacen informar. Yo no quiero intervenir, pero no veo problemas profundos en el fútbol inglés", se desmarcó Wenger.
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