Guardiola, el 'tirano'

Raúl Baena fue castigado por el técnico azulgrana y ahora es obligado a pagar una indemnización





Baena firmó con sólo 13 añitos un contrato no profesional con el Barcelona, en el que el club azulgrana se comprometía a su formación educativa y futbolística. Esa firma unía a ambas partes durante ocho años pero tras cinco años, surgieron los primeros problemas. El joven, que llegó a jugar en la selección española Sub 17, vio como el descenso de su equipo a Tercera División, le sepultaba por lo que, con la intención de no estancarse, pidió hacer la pretemporada con el filial B.

Pep Guardiola, actual técnico del primer equipo, era por entonces el de aquél filial y rechazó la petición de Baena, que decidió armarse de valor y marcharse al Espanyol. Aquel gesto de valentía con la única intención de seguir progresando, le puede costar caro al chaval, que ahora ha sido obligado a indemnizar a los blaugranas con 530.000 euros. Y puede dar gracias porque, anteriormente, los del Camp Nou solicitaron nada menos que tres millones y medio de euros.

Se le acusa de romper anticipadamente el contrato y de incumplir una de las cláusulas del precontrato. Sólo la acertada intervención de la defensa, que consideró que el contrato era semiprofesional y su validez no es interdependiente, evitó que el mal trago para Baena fuera aún peor. En fin, un caso idéntico al de Feran Mérida pero con distintos involucrados.

Así, esa cantidad tan desproporcionada ha valido para que el juez opinara que, de aceptarse dichas pretensiones, el jugador fuera considerado “cautivo” del Barcelona por la imposibilidad absoluta del joven a pagar tal indemnización. Al final, todo se ha cerrado en 80.000 euros. Una ‘pasta’ para un chaval al que Guardiola derrumbó y al que ahora quiere terminar de enterrar.