Según han informado fuentes judiciales, la juez que ha asumido la investigación ha tomado declaración como imputado a un sexto jugador del "Bada Bing" que era buscado por la policía y hoy ha comparecido voluntariamente en el juzgado, aunque no ha sido reconocido por las víctimas de las agresiones. Asimismo, siguen en libertad con cargos otros dos jugadores, uno de los cuales ha sido también reconocido por uno de los heridos, mientras que el otro no ha participado en las identificaciones de hoy porque tiene un físico muy particular que no coincidía con el de los voluntarios que se han escogido para las ruedas.
La titular del juzgado de instrucción número 5 de Barcelona ha decidido confirmar la prisión preventiva para Valentín Moreno (principal condenado por el crimen de la Vila Olímpica), su hermano Israel -que ha acudido al juzgado vestido con una camiseta del Real Madrid- y Carlos R.G., atendiendo a la gravedad de las lesiones que provocaron a los miembros del equipo rival. En la vistilla para decidir sobre la situación de los detenidos, a la que no ha comparecido la fiscal, las defensas han pedido que se les dejara en libertad con cargos a la espera de juicio, mientras que la acusación particular ejercida por las víctimas ha solicitado que se les mantuviera encarcelados.
Los tres, junto a otro jugador a quien el juez de guardia dejó en libertad con cargos por no haber suficientes indicios de su participación en las agresiones, han sido señalados en la rueda de reconocimiento por uno de los heridos. Además de esta víctima, a las ruedas de reconocimiento han acudido otros doce miembros del equipo que sufrió el ataque, varios de los cuales han identificado también a algunos de los agresores y a los que el juzgado ha brindado la posibilidad de ejercer acciones legales como perjudicados.
La agresión se produjo el sábado 10 de enero en el transcurso de un partido de Tercera División Regional entre el equipo de los detenidos y el Rosario Central, después de que el árbitro expulsara a un jugador del "Bada Bing", donde juegan integrantes del grupo radical de seguidores del F.C. Barcelona "Boixos Nois". Según el relato de las víctimas, en el ataque a los jugadores del Rosario Central se produjeron tres focos de agresión, uno en los vestuarios del campo de fútbol, otro en las escaleras -donde presuntamente fue lesionada una chica que grababa lo sucedido con una cámara- y otro al presidente del equipo, que es disminuido.
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