Un penalti polémico desluce el primer título de Quique Flores en Portugal

Ganó la Copa de la Liga





Quique, que cumple su primer año en Portugal, ha vivido momentos difíciles durante la temporada, en la que fue prematuramente eliminado de la Copa de la UEFA, de la Copa de Portugal y dejó escapar el liderato del campeonato nacional en favor del Oporto, del que ahora está a cinco puntos. La final de la Copa de la Liga ante su rival capitalino Sporting ha supuesto un balón de oxígeno para el técnico español, que sin embargo, ha visto deslucido su éxito por la forma en la que se desarrolló el encuentro.

Las reacciones más duras por la injusticia del resultado vienen del entrenador del Sporting, Paulo Bento, quien declaró que el penalti "hizo dar la vuelta a la lógica del partido" y que la decisión que tomó el árbitro no fue de "plena consciencia". Incluso una autoridad portuguesa del fútbol como José Mourinho, entrenador del Inter de Milán, señaló que si fuese entrenador del Benfica "quizá estaría un poco avergonzado por haber ganado la Copa así". Mientras, el árbitro de la cita, Lucílio Baptista, ha llegado a pedir disculpas públicas por el error de bulto y se justificó alegando que le "engañó la trayectoria del balón".

La afición, dividida

Pero, el antiguo entrenador del Valencia y Getafe, que no participó activamente en la fiesta de los jugadores y aficionados, también ha tenido sus defensores, entre los que destaca el director deportivo del Benfica, Rui Costa, y el jugador brasileño David Luiz. "La dedicación de Quique nos dio la Copa de la Liga", argumentó a la prensa lusa el lateral benfiquista, quien se quejó de las personas que exigen demasiado a su entrenador sólo porque saben que "tiene potencial". El propio Quique, quien prometió tras la final continuar trabajando de la misma manera, indicó que las críticas que ha recibido el equipo son símbolo de "su grandeza" y prometió dar todo para disputar el título nacional.

Entre tanto la opinión de los seguidores del Benfica se divide entre los que confían en el trabajo del entrenador español y los que opinan que la falta de resultados y el juego "rácano" practicado no están dentro de la grandeza del club. "El fallo arbitral quita brilla al triunfo, pero es la segunda final que el Benfica vence con entrenador español, tras la Copa ganada por José Antonio Camacho en 2004", argumenta a EFE José Manuel Delgado, director adjunto del diario "A Bola" y antiguo jugador del Benfica.