Campeones de la mala educación





Viene a cuento esto de los cortes de manga a la butifarra que Touré Yayá le dedicó a la sufrida afición del Athletic de Bilbao el pasado miércoles en Mestalla. Pero Touré Yayá no es el primer representante del Barcelona que extiende el brazo para golpeárselo en el medio y con violencia con la mano del otro brazo.

Una demostración de que el Barcelona es históricamente el campeón de la mala educación es que otros componentes de su plantilla hicieron alarde de ese arte como el brasileño Giovanni o el maleducado Schuster cuando defendía esa camiseta. Además, un jugador que se educó en el Campo Nuevo también quiso dejar huella de esa escuela, nos referimos a Van Bommel.

Giovanni dedicó al público madridista cuatro o cinco butifarras, rápidas y limpias. Fue en 1977 en el Santiago Bernabéu, con 2-2 en el marcador el mediocre futbolista del Barcelona marcaba el 2-3 en el minuto 79 y se paseó como un loco tirando cortes de manga a la grada.

Otro que tal baila es Bernd Schuster, que ha demostrado en no pocas ocasiones que eso de la educación no va con él. Fue en la final de Copa de 1983 entre el Real Madrid y el Barcelona en La Romareda. El encuentro iba 1-1 en el minuto 90, cuando Marcos Alonso lograba el 1-2 para su equipo. El nibelungo lo celebró con dos cortes de manga hacia la afición madridista.


Y el último de esta ‘amable’ lista es Van Bommel, al que le bastó un año en Barcelona para conocer como se educa allí al futbolista. Le dedicó una butifarra al público del Bernabéu en partido de Champion defendiendo la camiseta del Bayern un año después de irse del Campo Nuevo. Van Bommel marcaba el segundo gol del equipo alemán que perdía y perdió 3-2. Eso sí, el gesto le costó una sanción de la UEFA.