La enfermedad fue detectada con motivo de un examen médico de pretemporada y el tumor fue extirpado el pasado 10 de julio en un hospital de la ciudad de Tournai (sur del país).
Baseggio, de 31 años, deberá someterse a nuevas pruebas antes de saber si ha superado la enfermedad, algo que podría determinarse en un plazo de cuatro a seis meses, en cuyo caso podrá retornar a los terrenos de juego.
Centrocampista internacional que triunfó en el Anderlecht de Bruselas a comienzos de esta década, Baseggio milita actualmente en el Excelsior de Mouscron, un club de la primera división belga que tiene en nómina a varios jugadores españoles.
Baseggio, en unas declaraciones al diario "Le Soir", reconoce que tiene una enfermedad "muy seria" pero asegura que mantiene la esperanza porque "el índice de curación es muy elevado".
También explica que está siendo sometido a un tratamiento a base de yodo, "una especie de quimioterapia acelerada".
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