Brasil no suelta el acelerador

Derrotó 4-2 a Chile a pesar de las bajas





Un portentoso Nilmar, autor de tres goles, y un decisivo Daniel Alves, que sirvió dos asistencias, lideraron la victoria de la selección pentacampeona del mundo, que sufrió la expulsión de Felipe Melo, mientras que el chileno Alexis Sánchez también vio la tarjeta roja.

Humberto Suazo, jugador del Monterrey mexicano, anotó los dos goles de los chilenos, que fueron insuficientes ante la efectividad de Brasil, por lo que la 'Roja' se estacionó en 27 puntos, cinco por encima de Argentina, que ocupa de momento el puesto de la repesca ante la quinta selección de las eliminatorias de la Concacaf.

Brasil, con 33 puntos, confirmó su liderazgo regional y exhibió un fútbol rápido, efectivo e imaginativo, a pesar de sufrir importantes bajas como la de Kaká, Robinho, Luis Fabiano y Lucio.

Para suplir estas ausencias, el seleccionador Carlos Caetano Bledorn Verri 'Dunga' sorprendió y alineó como centrocampista al lateral derecho Daniel Alves, del Barcelona español.

El resultado del experimento fue muy positivo. Desde los primeros instantes, Alves aportó rapidez al juego de los brasileños y contribuyó para ensanchar el campo y para conectar con peligro con los delanteros.

 

Nilmar fue la estrella

- Ficha técnica:

4. Brasil: Julio César; Maicon, Miranda, Luisão, André Santos (m.70, Elano), Gilberto Silva, Felipe Melo, Daniel Alves, Julio Batista (m.67, Sandro), Nilmar y Adriano (m.67, Diego Tardelli). Seleccionador: Dunga.

2. Chile: Claudio Bravo; Gary Medel, Gonzalo Jara, Waldo Ponce, Arturo Vidal (m.45, Roberto Cereceda), Rodrigo Millar (m.67, Mauricio Isla), Carlos Carmona, Matías Fernández, Alexis Sánchez, Humberto Suazo (m.67, Jorge Valdivia) y Jean Beausejour. Seleccionador: Marcelo Bielsa.

Goles: 1-0, m.31: Nilmar. 2-0, m.40: Julio Baptista. 2-1, m.45: Humberto Suazo, de penalti. 2-2, m.52: Humberto Suazo. 3-2, m.73: Nilmar. 4-2, m.75: Nilmar.

Árbitro: El uruguayo Jorge Larrionda. Expulsó a Felipe Melo, de Barsil, y a Alexis Sánchez, de Chile, y amonestó al chileno Gonzalo Jara.

Incidencias: Partido de la decimosexta jornada de las eliminatorias del Mundial de Sudáfrica 2010, que se disputó en el estadio Pituaçu, de la ciudad brasileña de Salvador, ante unos 30.000 espectadores.

Brasil demostraba las ganas de un equipo que se juega la vida por un billete para el Mundial, a pesar de tenerlo ya garantizado, mientras que Chile aguantaba con temple y arrancaba en peligrosos contraataques, casi siempre lanzados por la banda derecha, en la que los anfitriones mostraban más brechas defensivas.

Conforme avanzaba el reloj, los brasileños incrementaron su acecho al área chilena y consiguieron el premio del gol a la media hora, con un brillante centro de Alves, que conectó en plancha Nilmar.

Chile tuvo una ocasión de oro de empatar en un tiro a bocajarro de Matías Fernández, que el arquero Julio César salvó con reflejos y a mano cambiada, dejando aún la bola a merced de Humberto Suazo, que remató fuera, de media volea.

A continuación, un enorme despiste defensivo en la zaga chilena fue aprovechado por un Nilmar muy despierto, que robó la bola y se la pasó a Daniel Alves.

En su segunda asistencia de la noche, el jugador del Barça se la sirvió a Julio Baptista, para que éste la colocase junto al poste izquierdo de la portería de Claudio Bravo.

Brasil estaba viviendo los mejores momentos de la noche, pero Chile, lejos de bajar los brazos, continuó luchando y logró reducir distancias justo antes del descanso en un penalti sobre Alexis Sánchez, que transformaría Suazo con un remate fuerte y alto.

Tras la reanudación, Brasil se quedó con diez hombres por la expulsión de Felipe Melo por una entrada desmedida sobre Alexis Sánchez.

Chile aprovecharía la superioridad y el desconcierto de la defensa local para empatar el partido con un centro teledirigido de Jean Beausejour, que remató Humberto Suazo totalmente libre de marcaje.

Con un hombre más, Chile ganó presencia en campo contrario, aunque los de Dunga tampoco renunciaron a subir al ataque y volvieron a demostrar su enorme pegada en un desborde de Maicon por la derecha, que cabeceó picado Nilmar para poner el tercero.

Nilmar, en una noche inspirada, se encargó de poner la guinda de la goleada, al aprovechar un rechace que le sirvió para reivindicar una plaza de titular en el conjunto dirigido por Dunga.