Luis parte rumbo al Fenerbahçe





El futuro de Luis Aragonés lejos de la "Roja" apunta hacia tierras turcas. El todavía seleccionador nacional está muy cerca de cerrar su acuerdo con el Fenerbahçe, equipo al que dirigirá la próxima temporada. Lógicamente, como buen "Sabio" que es, Luis no hará público su fichaje con los turcos hasta después de la Eurocopa, para no interferir en la concentración de la que todavía es su selección.

Así pues, Luis Aragonés firmará un contrato por dos años con el conjunto en el que milita el ex madridista Roberto Carlos. Pepe Navarro, agente de Luis, ha sido el encargado de gestionar las negociaciones oportunas, cuyos frutos podrían darse a conocer de manera oficial a partir del 29 de junio, fecha en la que finaliza la competición europea.

Además, Aragonés no emprenderá el viaje hacia el país otomano solo, sino que desea llevarse a todo su actual cuerpo técnico, manteniendo unido su grupo de trabajo. Luis sustituirá de esta manera a Zico, entrenador del Fenerbahçe en las dos últimas temporadas, cuya salida estuvo manchada por las acusaciones de la Prensa turca, que le culpaba del fracaso liguero del equipo otomano. Zico no aguantó la presión y decidió hacer las maletas. Ahora, el brasileño apunta maneras para ser el próximo seleccionador de Portugal.

También van a por Güiza

La brillante campaña del jerezano en la Liga ha suscitado el interés de muchos clubes, tanto nacionales como internacionales. Y el Fenerbahçe no ha querido hacer tampoco oídos sordos al delantero del Mallorca. Güiza está dispuesto a dar el salto y cruzar las fronteras de España, donde las ofertas no parecen concretarse.

El club balear no está muy por la labor de negociar con los turcos. No quieren poner fácil la salida de su estrella. Por tanto, si el Fenerbahçe insiste por el jugador, deberá pagar los 15 millones de cláusula que figuran en el contrato de Güiza. El delantero tiene una razón de peso (económicamente hablando) para seguir los pasos de Luis Aragonés. El jerezano, de recalar en el conjunto turco, pasaría de cobrar 600.000 euros a 3 millones netos al año.