Evo Morales: "Gracias al fútbol soy presidente de Bolivia"

"Quisiera morir luchando por los derechos de los pueblos. Pero si no se me presenta esa oportunidad quisiera morir jugando fútbol"





El presidente de Bolivia, Evo Morales, aseguró que haber llegado a ese cargo se debe en gran parte a la pasión que desde niño siente por el fútbol, ya que le permitió hacerse conocido. Tan grande es esa pasión que, en una entrevista que publica hoy el diario El Mercurio, de Santiago, Morales afirmó que quisiera "morir luchando por los derechos de los pueblos". "Pero si no se me presenta esa oportunidad quisiera morir jugando fútbol", añadió.

El mandatario, que frente al veto de la FIFA a la disputa de partidos en altitud reaccionó organizando encuentros en localidades de su país situadas a más de 4.000 metros sobre el nivel del mar, considera que en Bolivia el fútbol es un factor de integración, de unidad. "El fútbol es lo máximo en Bolivia, en el campo, en las ciudades, en el altiplano, en el valle, en el Oriente", señaló el gobernante, que incluso se da tiempo para correr un rato tras el balón en medio de foros internacionales a los que debe asistir por su cargo.

"Yo diría, inclusive, que gracias al fútbol soy presidente", sostuvo Morales, que recordó que de niño fundó el club "Fraternidad" en su pueblo de Orinoca (Oruro) y que, a los 14 ó 15 años, "era el dueño, el capitán y el delegado del equipo", además de árbitro. Agregó que a los 16 años fue designado técnico de la selección de Orinoca. En esa función "intenté, inventé algunas formas tácticas, como la triangulación", ya que no tenía ninguna formación, "sólo la voluntad de hacer fútbol", destacó.

En esa etapa, explicó, comenzó a hacerse conocido y empezó también su trayectoria en un sindicato, donde su primer cargo fue el de secretario de Deportes. "Ahí empieza mi trayectoria sindical y política, hasta llegar a la presidencia. A veces digo que no es sólo la defensa de la hoja de coca, sino que, desde que empecé, es el fútbol el que me lleva hasta la presidencia", indicó. Como buen aficionado, Evo Morales admira a Pelé y Maradona, entre los astros "históricos" y a Ronaldinho entre los más recientes, y siente dolor porque Bolivia no logra encumbrarse en el ámbito futbolístico.

"Es doloroso ver que nuestra selección pierda, especialmente de local, eso hace pensar en cómo mejorar el fútbol y el deporte en su conjunto", señaló Morales, que dijo admirar el desarrollo deportivo de Cuba, que a su juicio, a nivel de Juegos Olímpicos, es el mejor representante de Latinoamérica. Morales, asimismo, admitió: "en la Copa Libertadores soy medio oportunista; siempre estoy con el campeón (boliviano), para que pueda representar dignamente a mi país, pero cuando es eliminado, apoyo a Boca Juniors y, en los mundiales, apoyo a Brasil".

"Perdóneme, pero somos fanáticos del deporte y hay que escoger algún equipo para apoyarlo permanentemente, sea en la Copa Libertadores o en el Mundial, para que represente a Latinoamérica", concluyó.