Sólo hay un Cristiano

Cada nombre que suena para el extremo blanco se cae ante la alargada sombra del portugués





La búsqueda de un hombre de banda es un tema que viene de largo ya que antes incluso de acelerar la llegada de los dos refuerzos invernales (debido a las bajas de larga duración de Van Nistelrooy y Diarra), se hablaba de la inminente llegada de un jugador para esa demarcación en particular.

Sin embargo, el alto precio de Young, la poca viabilidad de Krasic, las altas pretensiones de Pennant o el dubitativo pasado de Valencia, han dejado ese fichaje en un ‘off’ peligroso que puede incluso quedarse definitivamente sin cerrar. Más allá de los numerosos impedimentos encontrados en el camino, las bases de todas esas dudas radican en el nombre y rentabilidad que puedan dar al equipo cada uno de esos jugadores.

El listón para un jugador de banda, desequilibrante, potente, habilidoso y con gol, está demasiado alto para todo extremo del mundo cuando meses atrás todos veían en esas ‘guisas’ a Cristiano Ronaldo. El luso mezcla todas esas premisas y muchas más, con lo que resulta imposible que cualquiera que se asome como futurible, salga dolorosamente maltratado en la comparación. Cristiano fue objetivo número uno, muchos fijaron su contratación a la idea de un nuevo Madrid que girara en torno a su figura y su llegada, más allá de trastocar negativamente todos los planes veraniegos (con la salida de Robinho y la mala planificación de la plantilla actual), sigue lastrando cada paso al frente.

Cada presentación de un nuevo jugador sirve como excusa para que se recuerde al presidente que Cristiano sigue en Old Trafford (y sin buenas perspectivas de que eso cambie), con lo que resulta imposible colocar a un supuesto sustituto con la plausibilidad de la masa merengue. Y es que Cristiano sólo hay uno y todo lo demás sabe a fracaso, a segundas opciones y a malos resultados.