¿Se desinfla la Premier?





Es difícil ponerse de acuerdo a la hora de valorar las dos mejores Ligas del mundo, pero lo que si  se puede  es evaluar el comienzo de temporada de  los conjuntos ingleses que han visto como piezas claves en sus equipos han optado por el Real Madrid, como es el caso de dos grandes como Manchester United y Liverpool. Por un lado, Rafa Benítez, han dejado salir a Xabi Alonso, jugador que marcaba el ritmo del equipo al mismo tiempo que destruía el juego contrario. Un intermediario entre la defensa y el ataque que seguro encuentra en Kaká y Lass unos buenos aliados para esta temporada. Por lo menos los de Anfield Road, quienes se dejaron los tres primeros puntos en White Hart Lane, todavía conservan al capitán Steven Gerrard, jugador que está cubriendo la marcha de Alonso y la baja del recién llegado Aquilani.

El caso del United es más trágico, ya que han perdido una pieza muy sofisticada que no se encuentra en todos los talleres. Eso lo sabe Ferguson, entrenador de los Red Devils, quien en el segundo partido de esta temporada se tiraba de los pelos al ver que los suyos no eran capaces de remontar frente a un recién ascendido como es el Burnley. Llegaron incluso a fallar un penalti, tiros que normalmente eran encargados al astro luso, jugador que ya ha demostrado con el Real Madrid que es un experto desde los 11 metros.

Michael Owen, curiosamente ex jugador del Madrid, es el que ahora porta el ‘7’ del portugués, pero su olfato goleador demostrado en el comienzo liguero poco tiene que ver con el del Balón de Oro.

Podríamos así decir que campeón y subcampeón de la Premier se han visto  en parte mermados por la pérdida de jugadores tan desequilibrantes como son Xabi Alonso o Cristiano Ronaldo. Esto demuestra que la propia liga inglesa también se está resintiendo de estas ausencias, siendo la beneficiada la liga española, y en concreto, el Real Madrid. Pero el fútbol español tendrá que demostrar en Europa que puede competir con la Premier League, campeonato que lleva tres años incluyendo a tres de sus equipos en las semifinales de la Champions League. Indudablemente, nos espera una temporada de odiosas comparaciones, pero donde el espectáculo seguro que está servido.