Un fichaje inesperado

"El sábado Kaká se pareció al jugador que impresionó al mundo en el Milan y que dio motivos al Madrid para que le fichara"


cuandonohaya

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Tras ver su debut ante Los Angeles Galaxy, me reafirmo un poquito más en esta opinión. Evidentemente, el partido del sábado no puede ser una gran vara de medir, pues se trataba del primer choque de pretemporada y enfrente estaba un equipo de nivel bajo. Pero aún así, Kaká evidenció que esta temporada podría ser distinta. Siempre y cuando las lesiones le respeten, claro. Si el brasileño consiguiese encadenar varios meses sin pasar por la enfermería la situación podría dar un vuelco. De pronto, el Madrid se encontraría con uno de los mejores jugadores del mundo. Con uno de esos que vale 65 millones de euros.

Al futbolista se le vio fresco, con recorrido, con desborde. Se pareció al jugador que impresionó al planeta en el Milan y que dio motivos al Madrid para que le fichara. Solo fueron 45 minutos, pero tiempo suficiente para recuperar las esperanzas en él. De hecho, su final de la pasada temporada no fue nada malo, pues el jugador realizó grandes partidos en plazas siempre complicadas como la de Mestalla o San Mamés. El mediapunta aprovechó los minutos que le dio Mourinho para reivindicarse a base de goles (7) y asistencias (5).

Por ello, paciencia con él. Su categoría (todavía) de estrella le hace bastante rentable a nivel económico, además de que su hipotética venta dejaría algo desprotegida la posición de mediapunta. Bien es cierto que el Madrid ya tiene ahí a Özil y podría situar en ese sitio a Sahin de vez en cuando, pero el único especialista para la posición junto al alemán es Kaká. Y es que, venderlo supondría, probablemente, fichar a un reemplazo.

Así que démosle una última oportunidad al brasileño. Dejemos que sea Mourinho el que se encargue de su recuperación y que Kaká evidencie que aún tiene mucho fútbol por dar. La apuesta tendrá riesgos, pero puede salir ganadora. Y si así fuera, el Real Madrid multiplicaría su potencial. Porque por una vez en tres años, el futbolista quiere demostrar que ha nacido para jugar en el Madrid. Porque Kaká quiere convertirse esta temporada en el mejor fichaje del club.