Tras una temporada llena de sobresaltos, falsas informaciones, y por qué no decirlo, un juego bastante irregular del Real Madrid, parece que el 'Mou-team' ha recuperado su sino. Varios de los jugadores que fueron clave la temporada pasada, han recuperado su mejor nivel.
Lógicamente, Cristiano Ronaldo es uno de ellos, pero si el Madrid comienza a parecerse a la máquina arrolladora de la temporada pasada, no es sólo gracias al portugués. Cada jugador aporta lo suyo, pero siempre hay alguno que sobresale sobre los demás.
El Madrid de Mou siempre se ha caracterizado por ser un equipo; la solidaridad y el rigor táctico siempre estuvieron a la orden del día, aunque durante los 4 primeros meses de competición parecía olvidado. Sami Khedira se ha encargado de recuperar semejantes virtudes.
El alemán se encuentra en el mejor momento de forma desde que llegó a Concha Espina. Su poderío físico y su entrega total en el campo, contagian a sus compañeros que, tirados por el alemán y el portugués, han ido hacia arriba en los últimos partidos.
Esta noche, llega una verdadera prueba de fuego; para ganarle al Barcelona, ya se sabe cuál es la receta: presión adelantada, y salida fulgurante en transiciones rápidas. Del trabajo de Khedira y de la inspiración de Cristiano Ronaldo dependerá en buena parte, el resultado del plan de Mourinho.
No hay jugador más capacitado para ahogar la salida de balón azulgrana que el centrocampista germano, y no hay futbolista que infunda más respeto cuando de jugar a la espalda y con espacios se trata. Cristiano ya lo ha demostrado en los últimos clásicos. La dupla Khedira-Cristiano debe ser el faro que guíe al Madrid a la victoria.
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