Con el disfraz de ratón en Santander

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Las cuentas en la calle Concha Espina son claras: ganando los tres partidos que quedan en el Bernabéu, el Madrid será campeón de Liga por trigésimo primera vez en su historia. Hoy, los blancos juegan fuera de casa, ante un equipo que desprende aroma de Champions, frente a un rival habitualmente indigesto y sabiendo que el Barça, el eterno segundón, sólo cosechó un puntito ante el Espanyol. Así que Schuster, el de la excelencia, minará el campo de músculo para obstaculizar al Racing: el Madrid será el ratón que tratará de escapar del gato.



El ajo y el perejil.

No es para menos, los entrenados por el míster alemán no ganan fuera de casa desde el 1 de marzo, el día del Robinhazo en Huelva, y las sensaciones que vienen dejando en este 2008 no son todo lo positivas que el madridismo demanda, aunque el trofeo liguero tenga ya marcadas las huellas dactilares de los blancos. El gato racinguista acecha un objetivo que parecía utópico a principios de temporada, colarse en la Liga de Campeones, y lo hace en buena lid: pelea contra el gafazo del Atlético (garantía de éxito siempre), tiene un entrenador estupendo (Marcelino), un bloque solidísimo, un portero de garantías (Toño) y un ex madridista en la delantera (Munitis). Justo los ingredientes necesarios para hacer del Madrid un ratón a la plancha con ajito y perejil.

Schuster quiere impedir el festín del gato cántabro, por lo que tiene muy claro cómo toca defender hoy: a Casillas le protegerán la mejor zaga de Europa si no le da un ataque de entrenador y, algo más arriba, dos volantes de contención, Gago y Diarra. Lo que no tiene tan claro es qué hará con los cuatro que ataquen. Sneijder y Raúl tienen puesto seguro, el primero por sus prestaciones en este tramo final de la temporada y el segundo... porque es él. Las otras dos plazas deberán repartírselas entre Robinho, Robben, Baptista y Saviola, lo que podría provocar además serias alteraciones de dibujo.

Con Robben y Robinho, Schuster le metería al partido ritmo de Rob&Rob: rapidez, desborde por banda y la calidad meridiana de los dos cuando rondan el área rival. Esa parecía haber sido durante toda la semana la apuesta segura para el partido en El Sardinero, pero... Pero Robben ha acusado un golpe en los últimos días y, aunque ha entrado sin problemas en la convocatoria, podría rotar, ese verbo que Schuster conjuga cuando uno menos se lo espera. Robinho, últimamente con la cruz, tampoco las tiene todas consigo.



Saviola o Baptista.

Eso le da posibilidades a Saviola, quien no juega un solo minuto en Liga desde hace justo una vuelta (victoria ante el Racing por 3-1 en el Bernabéu). El argentino, además, no es titular desde la jornada 9, pero el librillo de Schuster es indescifrable. La otra opción es el regreso del castigado Baptista, cuya figura se está diluyendo en el equipo tal y como hacía Jack el Destripador entre la espesa niebla londinense. Con el primero, el Madrid jugaría con dos puntas pero Sneijder sería desterrado a una banda: o martirio para él o via crucis para Ramos. Con el segundo, el Madrid ganaría dos llegadores: el brasileño y la perla holandesa. Teniendo en cuenta cómo se plantea el partido, la Bestia podría ser vital esta tarde.

Para acabar, tres apuntes. Ni arbitra Turienzo (pitar descaradamente a favor del Barça sólo está al alcance del trencilla balear), ni juega Garay (por quien se pelea media Europa, entre otros el Madrid) y el partido será pasado por agua: a partir de las 17:00 y hasta la media noche, las posibilidades de lluvia fuerte sobre El Sardinero son del 60 por ciento. Si la gomina le aguanta a Muñiz Fernández bajo el aguacero, me afilio a su club de fans.


Alineaciones probables

Racing: Toño; Pinillos, Oriol o Moratón, César Navas, Ayoze; Jorge López, Duscher, Colsa, Serrano; Munitis y Tchité.
Real Madrid: Iker Casillas; Sergio Ramos, Pepe, Cannavaro, Heinze; Gago, Diarra; Robben o Saviola, Sneijder, Robinho o Baptista; y Raúl.

Árbitro: César Muñiz Fernández (asturiano).

Estadio: Campos de Sport de El Sardinero.

Hora y televisión: 19:00 (PPV).