Según relata en su propio blog, fichar un futbolista debe seguir un ritual del que un club no debe desviarse. La calidad del futbolista es importante, pero también lo son sus costumbres familiares, sus tradiciones, su entorno o su nivel cultural. Todos estos parámetros ayudan al entrenador a confeccionarse una imagen más o menos válida del futbolista por el que va a apostar.
Evidentemente, para Benítez, es fundamental que un entrenadora tenga muy claro el estilo de fútbol que quiere imponer y además destaca la importancia del diálogo con el futbolista, para informarle de las pretensiones tácticas y para entender sus necesidades o incomodidades sobre el terreno de juego.
Mientras algunos llevan días empeñados en asegurar que Benítez es un entrenador rígido y ‘cabezón’, el madrileño vuelve a demostrar que su imagen está totalmente alejada de la realidad. La flexibilidad y el diálogo constante son dos parámetros sobre los que siempre se ha basado para intentar que sus equipos funcionen como una máquina perfecta en el césped.
DEJA TU COMENTARIO