Porque desde que fichó por el Real Madrid, Isco ya ha demostrado que no se arruga, que sabe luchar, que sabe correr. Más allá del talento innato que tiene en sus botas, Alarcón ha interiorizado rápidamente lo que el público del Bernabéu demanda: lucha, brega, sacrificio sin balón y entrega total hacia sus compañeros. Benítez está encantado y le seguirá dando muchos minutos toda la temporada.
Sin duda, los regresos de James Rodríguez y Bale aumentarán la competencia en la parte de arriba. Isco, James, Bale competirán por dos puestos-Cristiano Ronaldo y Benzema son fijos-, pero el malagueño no se siente inferior a ninguno, es más, cada día se siente con más galones en el vestuario y sobre el césped.
El Málaga será un nuevo test para el ‘22’. No será una tarde sencilla para él; jugar ante tus ex siempre es complicado pero Isco está dispusto a realizar otro gran partido para encadilar al Santiago Bernabéu y demostrarle a Benítez que sí tiene calidad para dejar en el banquillo a James Rodríguez o a Gareth Bale.
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