Por mucho que se esté hablando de él, Benítez tiene claro que no va a cambiar su forma de ser. Él prefiere amoldar lo que tiene alrededor a sus gustos y a su independencia a la hora de generar el vestuario. Lógicamente está aprendiendo que en algunos aspectos no le va a quedar más que ceder, como en la casi obligación a la que le somete la prensa de decir cada poco tiempo en público que Cristiano Ronaldo es el mejor jugador del mundo. El entrenador es una persona inteligente y va a intentar huir de las polémicas siempre que pueda, a pesar de que también es consciente de que no lo va a tener sencillo.
La realidad es que Benítez cuenta con el apoyo de la directiva, que cuando le trajo buscaba precisamente lo que él podía aportar a raudales: mano dura. Mientras tanto, el vestuario se esfuerza por adaptarse al brusco cambio, porque de una temporada para otra han pasado de tener dos técnicos totalmente opuestos, Ancelotti y Rafa.
Según la información del citado medio a algunos jugadores les sorprende que el entrenador incluso les diga cómo deben chutar a portería, marcar a sus rivales o intentar robar un balón. Ni Cristiano se libra de estos consejos. Pero él es así y no va a cambiar, porque sus principios siempre han sido muy claros. Si el Madrid le quiere le tiene que querer tal y como es, no como a la prensa le gustaría que fuera. Así que el único camino es que tanto jugadores como directivos se acostumbren a sus métodos de trabajo. Algo que no es sencillo, pero con tiempo podrá conseguirse.
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