El Atlético de Madrid está demostrando este año que no es el mismo que en temporadas anteriores. Al menos por ahora. La falta de regularidad está matando a los colchoneros, que no consiguen meterse de lleno en la pelea por el liderato. Tras el empate de este viernes en Riazor, el Real Madrid tiene la ocasión de poner tierra de por medio con el conjunto que dirige Simeone, del mismo modo que también puede hacerlo el FC Barcelona.
Y es que el Atlético no pudo conseguir el triunfo ante el Deportivo en un encuentro marcado por un error de Giménez que supuso el tanto del empate de Lucas Pérez. Tiago había adelantado en la primera mitad al Atlético, que se echó atrás y lo terminó pagando (¿no decían que el defensivo era Benítez?). Lucas Pérez aprovechó un despiste del zaguero uruguayo para robarle la cartera y empatar el choque cuando quedaba un cuarto de hora de juego. El 1-1 fue el resultado final.
De esta forma, la jornada comenzó presentándose propicia para que el Real Madrid y el FC Barcelona puedan abrir brecha con el resto de los equipos en la clasificación. En el caso de los blancos, una victoria en casa ante Las Palmas dejaría al Atlético a cuatro puntos. El Barcelona, para conseguir esa misma diferencia, necesitaría un triunfo a domicilio ante el Getafe. Este sábado, el Madrid tiene prohibido fallar. Dejar al Atlético a -4 habiendo jugado ya en el Calderón sería un gran golpe sobre la mesa.
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