A su llegada a la Ciudad Real Madrid, Cristiano Ronaldo se ha parado a firmar unos autógrafos, pero justo antes de acabar un padre ha insistido tanto en hacerse una fotografía con él que le ha provocado una enorme sonrisa. Los nervios del hombre, que esperaba a que su hijo le sacase la instantánea han servido para que el portugués comenzase el día con alegría.
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