Tal y como destaca el diario 'As', desde su llegada al Real Madrid hace poco más de dos años el extremo se ha perdido un total de 35 partidos. Esto implica que Bale ha participado en casi tres de cada cuatro encuentros del club blanco (74 %) y ha tenido a su disposición el 65 % de los minutos de juego totales (7.824 de los 12.090 que ha disputado el Madrid). Por lo tanto, es evidente que las lesiones han marcado bastante sus primeros meses en la capital de España, aunque al menos el galés ha compensado este aspecto con una buena producción ofensiva por su parte.
Y es que, sin contar su papel en el encuentro ante el Barcelona, en sus 99 partidos oficiales anteriores con el equipo aportó 41 goles y 32 asistencias, por lo que ayudó a producir o marcar un total de 73 dianas. Lo que, extrapolado a los minutos de juego que ha tenido, nos lleva a concluir que anota o asiste una vez cada 107 minutos que disputa. Son unos datos que hacen honor a la expectación que generó el jugador a su llegada al club en el verano de 2013, aunque el madridismo sabe que todavía puede esperar aún más de Gareth. Su potencial es ilimitado y la etapa más complicada, la de la adaptación a España, ya está más que superada. Así que ahora el objetivo es que los mejores años de su carrera estén aún por llegar y que él pueda ofrecérselos al madridismo.
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