Era importante volver a entrar en dinámica ganadora tras sufrir dos derrotas consecutivas en Liga. Los de Rafa Benítez sabían que tenían que revertir la situación y que lo debían hacer lejos del coliseo blanco. Tres partidos a domicilio afrontaban los de Chamartín después del 'Clásico', uno el Champions, otro en Liga y el del próximo martes en Copa y, hasta el momento, ya van dos de tres.
La imagen del equipo ha mejorado. A pesar de los últimos minutos de desconcierto ante el Shakthar en los que el Real Madrid recibió tres tantos en apenas 10 minutos, la sensaciones que transmitieron los blancos el resto del encuentro fueron positivas. No es fácil en Europa ponerse con un 0-4 a favor y el rendimiento de jugadores claves también mejoró con respecto a otros partidos.
El de esta tarde tampoco era un partido sencillo de ganar. Ipurúa es un estadio complicado, el Eibar llegaba al encuentro como el equipo revelación de la temporada y en puestos europeos y, además, el Real Madrid tenía las bajas de hasta tres defensas titulares, por lo que Rafa Benítez ha tenido que improvisar una zaga de circunstancias. Ahora solo queda ganar en Cádiz para completar el reto y volver al Bernabéu listos para el derbi ante el Getafe.
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