Bale 'llevó los anillos' en el debut estelar de Zidane

Como ya había enseñado en el último entrenamiento, Zidane le dio galones de titular a Isco. Sobre el césped, el equipo del francés era mucho más parecido al de Ancelotti que al de Benítez. Kroos ejercía de ‘5’ y el mencionado Isco junto a Modric eran los propulsores de la ‘BBC’.

Ya desde el primer minuto de partido se vio que la actitud de los futbolistas era otra. Todos corriendo cuando el balón no se tenía, todos atacando cuando la ocasión lo demandaba, con posesiones largas si lo demandaba el juego. Apenas habían pasado ocho minutos de encuentro y el Madrid ya tenía su primera ocasión de peligro, un chut lejano de Cristiano Ronaldo que despejaba Lux.

Eso sí, de justicia era resaltar que el Deportivo presentó batalla sin arrugarse. De hecho, los visitantes respondían a esa primera ocasión de Cristiano con un remate de Lucas Pérez que sacaba Keylor Navas con una gran parada que evitaba el 0-1.

A partir de aquí, el Real Madrid fue mejorando en control y manejo del balón. Ayudó bastante el adelantarse en el marcador gracias a un toque de tacón de Benzema a la salida de un córner tras un remate en el segundo palo de Sergio Ramos. Los gallegos pedían fuera de juego, pero Karim estaba perfectamente habilitado para anotar y dar ese punto de tranquilidad al debut de Zidane.

Era evidente que Zidane se había llevado gran cantidad de los focos del partido, pero no es menos cierto que en el Real Madrid se producía la vuelta de uno de sus jugadores más importantes por lo que aporta en ataque y la energía que siempre le da a sus jugadas. Dani Carvajal sólo necesitaba 22 minutos para ponerle una asistencia medida a la cabeza de Bale para que el galés hiciera el 2-0 con un buen cabezazo picado.

El Bernabéu estaba disfrutando más que en ningún partido de la presente temporada. La gente tenía ganas de ver a su equipo tocar el balón, ser intenso y ganar por calidad más que por suspiros de inspiración. Cristiano Ronaldo estuvo a un pelo de brindarle a la gente el 3-0 de otro cabezazo, pero en esta ocasión fue el larguero el que impidió el pleno de la ‘BBC’.

El 2-0 era un colchón más que confortable para el Real Madrid, aunque bien es cierto que esta misma temporada con un resultado idéntico, los coruñeses fueron capaces de terminar empatando. Por eso fue de vital importancia ver como en apenas cuatro minutos de la segunda parte el Real Madrid ponía el 3-0 gracias a la asociación formada por Cristiano Ronaldo y Bale. El portugués asistió desde la banda derecha y el galés llegando desde atrás ponía el interior del pie izquierdo para ajustar el balón al palo izquierdo del portero. La sentencia.

El ‘bautizo’ de Zidane estaba siendo plácido y gustoso para la gente. Seguramente antes de empezar el partido el galo habría firmado tener un estreno con estas características. Además, Zizou tuvo un ‘padrino’ de lujo en la figura de Bale. El galés, que ya había marcado dos goles, completó su hat trick con otro gran remate de cabeza a la salida de un córner que suponía el cuarto tanto de la noche. Un Bale que, con este tanto, superaba los 50 goles oficiales con la camiseta madridista. Un dato para que más de uno no se ‘hernie’ buscándolo en el archivo de los ridículos.

Con el público encantado, el Real Madrid no iba a dejar terminar el partido sin que la manita se apoderara del electrónico del Santiago Bernabéu. Un contragolpe liderado por Jesé y que no pudo ser culminado en primera estancia por Cristiano Ronaldo, finalizó con un golazo de Karim Benzema después de un chut muy potente que golpeó en el larguero y acabó en la red. Fue el colofón perfecto para un partido sobresaliente, el del debut de Zidane como primer técnico del Real Madrid.