El Madrid mereció mucho más que el empate que se llevó

Mal arbitraje

Hay un entrenador en esta Liga que durante la pretemporada ya había avisado que esta Liga estaba “peligrosamente preparada para el Real Madrid”. No se puede negar que Simeone, al que horas antes le habían permitido jugar contra 10 jugadores sin ganar el partido, es un auténtico lince como pronosticador. Tampoco es descartable que esa ‘visión’ que tuvo en su momento fuera su forma de presionar a los colegiados para hacerle la vida (aun) más difícil al Real Madrid.

Sea como fuere, lo cierto es que el Real Madrid vio como en la primera parte del partido le robaban dos penaltis de forma descarada. El primero por un agarrón a Cristiano Ronaldo y el segundo por un pisotón más que evidente sobre Benzema. Dos acciones flagrantes que debieron terminar en pena máxima. Sin embargo, el árbitro del partido, el valenciano Martínez Munuera, parecía estar más pendiente de la música de la grada que del partido. Se tragó los dos, contribuyendo de forma 'evidente' a la teoría del entrenador del Atlético de Madrid.

Inicio difícil

Antes de que se produjeran las dos meteduras de pata del árbitro hay que decir que el Betis se adelantó en el marcador con un golazo de volea de Cejudo desde fuera del área. Seguramente será difícil que vuelva a repetir semejante impacto con el balón en mucho tiempo, pero esta vez atinó y le hizo pupa al Real Madrid.

El Real Madrid, sin embargo, y pese a las adversidades que se estaba encontrando en forma de arbitraje pésimo y de un Betis que rascaba por encima de lo que podría ser considerado como normal, encontraba respuesta. El balón no se rifaba en ningún momento, el equipo mantenía su personalidad y, además, se generaron dos grandes ocasiones que no acabaron en gol por falta de puntería. Primero fue un remate con la zurda de Cristiano Ronaldo tras una gran pared con Benzema y después sería un cabezazo de Pepe tras un saque de esquina el que se marcharía rozando el palo de Adán.

Adán, salvador del Betis

Después de una primera parte en la que el árbitro había sido el claro protagonista, la segunda mitad nos dejó otro hombre destacado que, para desgracia de los blancos, no fue otro que el portero del Betis, Antonio Adán.

Y es que el Real Madrid estuvo cerca de marcar el gol de la victoria en varias oportunidades. James Rodríguez tuvo dos de ellas, pero en la primera no pudo golpear bien el balón con la derecha y en la segunda apareció Adán para tapar su lanzamiento.

El otro gran protagonista de las ocasiones madridistas fue Karim Benzema. El francés, que fue el autor del 1-1 empujando una gran jugada colectiva del Real Madrid a pase de James, tuvo la mejor opción de lograr el tanto de la victoria en un remate de rabona medio cayéndose  pero, una vez, una mano salvadora de Adán evitaba que el Real Madrid se llevara tres puntos que, por lo visto sobre el campo, mereció.