Nada más llegar al banquillo del Real Madrid, Zidane, además de exigir a los jugadores mejor, se marcó el objetivo de llevarles a tener una preparación física acorde con el máximo nivel de competición. Después de tres semanas trabajando con ellos, el francés ha logrado que ya se note esa mejoría en el estado de forma de la mayoría de sus hombres.
Ante el Betis el equipo no consiguió ganar y se vio sorprendido en los diez primeros minutos por cómo salió el conjunto local, pero después imprimió un ritmo brutal durante ochenta minutos. Eso sirvió para demostrar que ya se encuentra mejor que hace unas semanas, aunque Zidane admitió que aún no se ha llegado a la plenitud física.
De hecho, hay algunos jugadores que van mejor y otros que van peor a la hora de conseguir el punto óptimo de forma, pero la media empieza a ser buena y así se pudo ver ante el Betis. Ahora toca seguir trabajando para que todos consigan estar en perfectas condiciones y Zidane pueda pulir otro tipo de detalles para que el equipo siga la línea ascendente.
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