A Karim Benzema nadie le ha regalado nada. El Real Madrid tuvo paciencia con él en los momentos difíciles, pero su calidad está fuera de toda duda y este año está demostrándose más que nunca. El delantero francés está viviendo la mejor etapa de su carrera deportiva a pesar de todos los asuntos extradeportivos que pesan sobre él y de todos los rumores de las últimas semanas. Lewandowski, Sergio Agüero, Morata o incluso Neymar llevan un tiempo sonando como refuerzo para el ataque madridista, pero Karim sigue a lo suyo: implacable ante la portería rival.
El delantero francés está muy tranquilo con su rol en el equipo. Ha aprendido a vivir con la presión que supone defender la camiseta del club más importante del mundo y no teme por su puesto, nunca temió por él y especialmente ahora que Zidane es el entrenador menos todavía. Ya con Rafa Benítez, Benzema estaba en un nivel colosal, y el cambio de entrenador no ha disminuido su rendimiento, sino más bien todo lo contrario. Con el resto del equipo enchufado y a la altura, el nivel de Karim también se ha visto mejorado en las últimas semanas y de marcar ante el Granada será su sexto encuentro consecutivo viendo portería, algo que ha hecho en todos los partidos disputados en este 2016. Benzema siente la confianza de Zizou y sabe que sólo si no da la talla perderá su puesto de privilegio en el equipo.
Ser el '9' de un club como el Real Madrid no es nada fácil, y Benzema ha ido superando pruebas hasta convencer a todo el madridismo. Incluso los más reacios a creer en él están empezando a rectificar gracias a su brillante campaña. Los rumores sobre la llegada de otro delantero centro continuarán, pero del mismo modo Karim seguirá a lo suyo: a hacer goles, a dar asistencias, a crear juego... Sus nervios de acero hacen que, cuando está en el terreno de juego, todo lo de alrededor no importa: sólo hacer magia con el balón en los pies, algo que se le da francamente bien.
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