Una vez más la lógica de Zidane se impone por su enorme sencillez: el 0-2 logrado en Roma invita a pensar que el equipo ya tiene un pie y medio en los cuartos de la final de la Champions, mientras que en la Liga la desventaja con el Barcelona es de 7 puntos con el 'Clásico' del Camp Nou pendiente. Así que basta con ser mínimamente realista para darse cuenta de que hay más opciones de levantar la 'Undécima' que de ganar el título liguero. Por eso la plantilla ya se ha hecho a la idea de que la Champions es el título más importante de lo que queda de temporada y la vía para corregir una temporada que se torció desde muy pronto.
Según 'ABC' Sergio Ramos ha liderado una 'conjura' que tiene la Copa de Europa en mente. El vestuario ha hablado y ha dado prioridad a la máxima competición europea. Quieren darlo todo en el campo para conseguirla y así lo harán en los próximos partidos; como ya hiciera el equipo en 1998 cuando logró la 'Séptima' tras quedar desahuciado en el campeonato doméstico. Así que el plan tranzado es sencillo: tomarse cada uno de los seis partidos que en teoría quedan como finales. Por eso solo piensan en dar lo mejor de sí en ellos, pero sin descuidar tampoco la Liga.
El plantel es consciente de que el título liguero está muy complicado, pero también quiere ir partido a partido en él. No dan carpetazo a sus opciones ni mucho menos. El Real Madrid de Zidane siempre saldrá a ganar al campo, sea la competición en la que esté. Aunque el francés empezará a plantear sus partidos mirando de reojo la Champions. Por eso a partir del próximo domingo en Málaga comenzarán las verdaderas rotaciones para dar 'aire' a la plantilla después del esfuerzo realizado esta semana en Roma.
DEJA TU COMENTARIO