No está siendo un año fácil para el malagueño. Con Rafa Benítez nunca se llegó a sentir importante, el malagueño no era muy de su agrado y su importancia en el equipo fue decreciendo con el paso de los meses. Con la llegada de Zidane comenzó como titular indiscutible, pero su rendimiento durante los dos primeros meses del francés en el banquillo no fue el esperado y Zizou lo mandó de vuelta al banquillo.
Ahora, en el último tramo del curso, Isco está recuperando su mejor versión y este sábado en Vallecas fue un buen ejemplo de esto. Su papel en la segunda mitad fue muy importante para que los blancos consiguieran la remontada y poder seguir luchando por el título liguero. Apareció en casi todas las acciones del Real Madrid, se asoció a la perfección con el resto de sus compañeros y participó de forma activa en el gol de Lucas Vázquez. Él fue quién asistió a Danilo antes de que el brasileño pusiera el centro que terminaría convirtiéndose en el empate a dos.
Poco a poco, Isco va recuperando importancia en las alineaciones de Zinedine Zidane. El preparador siempre ha sido un enamorado del centrocampista malagueño y uno de sus principales objetivos cuando se hizo cargo del equipo blanco fue el de recuperar al '22'. Viendo los últimos partidos, parece que el galo lo está consiguiendo.
Fuente de la imagen: realmadrid.com
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